La tecnología ha supuesto un gran empuje para el negocio de la restauración.
 
Cada vez hay más negocios que se apoyan en el uso de las nuevas tecnologías. Tener un ordenador no es cosa de oficinas, sino que muchos sectores se valen de la informática e Internet para mejorar su servicio. Como el mundo de la restauración, que ha experimentado un gran cambio en parte gracias a que hoy se utilizan equipos informáticos para gestionarlo.
 
Ordenadores para una gestión integral
 
Hoy, parece imposible no tener un negocio e incorporar al menos un ordenador. Es posible encontrar portatiles baratos con los que guardar un registro de las existencias que hay en el almacén o copias de las facturas de los proveedores, por ejemplo. Esto agiliza bastante las tareas de gestión, ya que no hay que estar consultando continuamente los archivos en papel. Tan solo hay que encender el ordenador y abrir el archivo en el que lo tenemos.
Además, hay programas que automatizan muchos procesos. Como el de facturación o cuentas, que ayuda de forma muy significativa a quien tiene que hacer el cierre de caja.
 
Equipamiento digital para optimizar el consumo
 
Pero la tecnología no son solo ordenadores y programas informáticos. También supone contar con equipos avanzados que mejoran el rendimiento. Algo en apariencia tan sencillo como una cámara frigorifica puede incorporar elementos digitales que hagan más precisa su función, logrando una mejor conservación del contenido. Y no solo eso, sino que también es una forma de optimizar el consumo de energía. Teniendo en cuenta que este equipamiento debe estar enchufado continuamente a la electricidad, todo lo que pueda ayudar a reducir el consumo y aprovechar los recursos es siempre positivo.
 
Smartphones para recoger pedidos
 
La imagen de un camarero que se acerca a la mesa con una libreta ha dejado de ser habitual. Hoy, lo normal es que en lugar de esta lleve en la mano un terminal móvil, con el que va marcando lo que pide cada comensal. Una forma rápida de hacer los pedidos, ya que no tiene que llegar a la barra o a la cocina para decir lo que quiere el cliente. El sistema con el que se conecta el terminal lo indica directamente todo, incluso el número de mesa al que corresponde.
Y es que los teléfonos móviles ya no sirven solamente para hablar. Son auténticos ordenadores de bolsillo que se conectan en red, y que gracias a aplicaciones de todo tipo facilitan mucho determinadas tareas. Incluso la de pasar la cuenta a los clientes cuando han terminado, ya que solo hay que dar orden a la caja de que saque el ticket y todo lo que se ha ido apuntando estará desglosado.
Normalmente se utilizan redes WiFi para conectar estos terminales. Es importante que esta red tenga contraseña, ya que hay quienes las aprovechan para hacerse con información, como comenta el hacking en Whatsapp por CahorESP.
 
Grupos y listas de fidelización
 
Además de gestión y servicio, la tecnología ayuda a mejorar la comunicación entre el negocio y el cliente. Por ejemplo, hay locales que atienden reservas por WhatsApp o envían a los habituales alguna notificación por redes sociales.
En este sentido, es importante ser un tanto cautelosos, ya que como se muestra en la web ComoEspiar.gratis, es posible, a veces por necesidad, que alguien intercepte las conversaciones. Pero tampoco hay por qué alarmarse demasiado, ya que lo normal no es que alguien que envía un mensaje esté tratando de robar datos.
En realidad, el sector de la restauración es cada vez más tecnológico. Y con las precauciones adecuadas, se pueden optimizar recursos y mejorar servicios.