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El informe Situación Inmobiliaria del Servicio de Estudios del BBVA advierte:
La vivienda caerá un 30% hasta finales de 2011
Redacción Madrid. 2 de junio. El mercado inmobiliario necesitará más tiempo de lo previsto para realizar su ajuste. El informe Situación Inmobiliaria del Servicio de Estudios del BBVA indica que los precios caerán un 10% este año, un 12% el siguiente y acumularán un descenso del 30% para finales de 2011. Mientras, el excedente de viviendas vacías, que la institución cifra en 1,2 millones, no volverá a los niveles alcanzados en 2005 hasta finales de 2012. Las últimas medidas aprobadas por el Gobierno, incluída la eliminación de la deducción por compra de vivienda partir de determinado nivel de renta, deberían contribuir a reducir la sobreoferta existente aunque también moderarán la caída de precios, según afirmó Mayte Ledo, economista del Servicio de Estudios del BBVA.
El estudio informe indica que el exceso de viviendas comenzará a absorberse desde el primer trimestre del próximo año, aunque la eliminación de la desgravación por compra, una medida que consideró adecuada, incluso con el umbral de 24.000 euros fijado inicialmente por el Gobierno, podría adelantar esa fecha. Ledó sugirió que lo más beneficioso para los compradores sería esperar lo máximo posible para comprar una vivienda antes de que la supresión entre en vigor, en 2011, y beneficiarse así tanto de la desgravación como de la esperada bajada de precios. El hecho, afirmó es que en 2011 se producirán "las menores condiciones de accesibilidad a la vivienda en los últimos 20 años".
Ledo señaló además que la supresión de la desgravación, que puede abaratar los precios en un 10%, tendrá un efecto escalonado en las compras y no provocará una avalancha de adquisciones.
La bajada de precios de la vivienda, junto a la caída del euribor, que "podría seguir reduciéndose hasta tasas cercanas al 1%" y la rebaja de los tipos de interés en la eurozona hasta el 0,5% antes de fin de año, son elementos positivos que juegan a favor de la reducción del stock de 1,2 millones de viviendas, de las que muchas están ahora en manos de la banca, aunque según Ledó, en una cifra "claramente inferior al 50%".
Ledó, quien afirmó que el esfuerzo del Gobierno para apoyar al sector de la construcción, equivalente al 2% del PIB, ha sido de los mayores de su entorno, incidió además en la importancia de estimular el alquiler, que sigue suponiendo sólo el 12% del mercado.