LAS GUERRAS DE RUSIA Y FÁTIMA
Fidel Garcia Martínez
La historia real de las apariciones de Fátima es uno de los acontecimientos más importantes del siglo XX, cuyos resultados perviven hoy de forma clara y contundente, como se puede constatar por las tensiones bélicas gravísimas entre Rusia y Ukrania, que afectan a todo el mundo directamente. En esta historia de las apariciones de Fátima, España tuvo un papel muy importante, desconocido y olvidado. La cronista oficial de las apariciones de Fátima, la Venerable Sor Lucia, cuyo proceso de beatificación está muy avanzado tuvo un papel muy destacado. La Canonización de sus primos, los hermanos Jacinta y Francisco, ha sido la respuesta más contundente a las criticas furiosas de incrédulos y sectarios. Sor Lucia vivió en España como religiosa de la congregación de las Doroteas. En esta casa religiosa Sor Lucía experimentó unas gracias sobrenaturales muy importantes. Precisamente fue en Tuy, Pontevedra, en donde Nuestra Señora le comunicó importantes mensajes sobre Rusia.
Como lo relata ella misma: “Me avisó Nuestra Señora de que había llegado el momento en que deseaba que el papa consagrase Rusia y así como la promesa de su conversión. Esta aparición sucedía el 13 del 6 de 1929, lo cuenta así: ”Estando una noche sola en la capilla me arrodillé, en el centro para rezar postrada, las oraciones que el Ángel nos había enseñado en Cova de Iría, sintiéndome cansada, me levanté y continué rezándolas con los brazos en cruz. No había más luz que la lámpara del sagrario. De repente se iluminó toda la capilla con una luz sobrenatural. Sobre el altar apareció una Cruz que llegaba hasta el techo. Estaba Nuestra Señora de Fátima con su Inmaculado Corazón en la mano izquierda, Nuestra Señora me dijo: “es llegado el momento en que Dios pide que el Santo Padre haga en unión con todos los obispos del Mundo la Consagración de Rusia a mí Inmaculado Corazón, prometiendo la salvación por este medio. Son tantas las almas que la justicia de Dios condena por los pecados contra mí cometidos que vengo a pedir reparación: sacríficate por esta intención y reza”.
Esta consagración de Rusia la realizó el papa San Juan Pablo II en la plaza de San Pedro en comunión con todos los obispos del mundo. La noche del 24 de marzo de 1984, ante la imagen de su capilla privada, llevada a Roma por el obispo de Leiría, pasó la noche en vigilia. El 25, día de la Anunciación, en la Plaza de San Pedro ante más de 200.000 fieles el Papa de Fátima San Juan Pablo II consagró el mundo solemnemente al Corazón de Maria en unión de todos los obispos del Mundo entero. Afirmó Sor Lucía, que la consagración fue hecha como Nuestra Señora pidió. Las consecuencias no se hicieron esperar: desmantelamiento del comunismo en Rusia, Caída del Muro de Berlín y cambios políticos en países como Hungria, Alemania Oriental, Checoslovaquia.
Este año, el mismo día 25 de Marzo el Papa Francisco con motivo de los acontecimientos trágicos que sacuden a todo el Mundo como consecuencias de la guerra Rusia - Ucrania, ha vuelto a renovar las consagración de estas dos naciones al Inmaculado Corazón de María.