Libres e Iguales: Si el Gobierno no reacciona, los españoles lo harán
Miguel Massanet Bosh. En ocasiones, los españoles sentimos que nos quedamos solos defendiendo unas ideas que parece que, para una gran mayoría, ya no tienen la vigencia que tuvieron en otros tiempos. Vemos, impotentes, como cada día van apareciendo más grupos antisistema que pretenden acabar con el sistema democrático del que nos dotamos y se van constituyendo nuevos seudo partidos que pretenden aglutinar el descontento que, la crisis por la que hemos pasado, ha creado en una parte importante del pueblo, que se ha visto azotado por la incompetencia del gobierno del señor Rodríguez Zapatero para enfrentarse a los retos de la crisis y la recesión y que, por otra parte, no ha sabido comprender, en sus naturales prisas para salir de las consecuencias del crack económico que ha causado tanto paro, tantos puestos de trabajo destruidos y cientos de miles de percances industriales que han mandado a cientos de miles de empresas a la ruina y la quiebra; que, la destrucción causada por el anterior gobierno socialista, junto a los problemas que ha tenido la UE para intentar encontrar una salida válida para todas las naciones que la integran; le ha ocasionado al nuevo Gobierno del PP muchas más dificultades de las que nunca se hubieran podido imaginar.
Ahora, precisamente cuando los primeros frutos de tantos sacrificios, tantas penurias y tantas penalidades de personas abocadas a una situación crítica, parecen haber entrado en una vía que puede conducir a una recuperación, una recuperación que, seguramente, será lenta y no exenta de momentos en los que puede que se tambalee y nos vuelva a crear incertidumbre y desconfianza; los que han estado agazapados durante los cinco años pasados, los causantes dolosos del desastre y los que tampoco supieron aportar nada a la recuperación pretendan sacar tajada de la situación.
Valiéndose de que el desgaste lo ha sufrido el Gobierno, que ha sido quien ha tenido que apechugar con las consecuencias de una política espartana, dura, difícilmente entendida por aquellos que se han llevado la peor parte; motivada fundamentalmente por las amenazas, presiones y recomendaciones de nuestros socios de Bruselas, que han exigido grandes reformas para concedernos ayudas y evitar que hayamos tenido que sufrir el rescate que, todo el mundo, ya daba por hecho; lo que no ha sido valorado por el pueblo en sus justos términos (Si hubiéramos sido rescatados todos los sacrificios que se han tenido que hacer se hubieran multiplicado por veinte y, con toda seguridad, el tiempo de recuperación se hubiera prolongado por unos años más); de pronto aparecen, como surgidos de la nada, aquellos corpúsculos de pretendidos salvadores de la patria que se ofrecen para hacer lo que fueron incapaces de hacer cuando tuvieron ocasión para ello.
Ellos son los que pretenden tener el verdadero talismán para que los españoles recuperemos el famoso “bienestar” de los tiempos de la “burbuja inmobiliaria”; algo que, cualquiera que tenga un poco de sentido común, sabe que es algo imposible porque, lo que sí es cierto, es que los tiempos de las especulaciones y enriquecimientos rápidos se han acabado. En el caso de Podemos, un partido más de los de la órbita comunista, el hecho de que se hayan mantenido en silencio, sin aportar idea alguna ni ofrecerse a colaborar de forma eficaz en la recuperación del país, durante los años de crisis; nos hace pensar que lo que intentan es arrimar el ascua a su sardina aprovechándose del natural cansancio de los ciudadanos de tantos años de crisis y privaciones para, lo mismo que hacen los charlatanes de feria, intentar vender, haciendo uso de la demagogia, una serie de ideas de imposible realización y de catastróficos resultados que, sin embargo, para quienes no se paran a analizarlas, les pueden resultar enormemente atractivas. Milagros en el siglo XXI, señores, no los hay.
Sin embargo, en lo referente al famoso independentismo catalán; aparte de lo que ha sido el gran bombazo motivado por la declaraciones del señor Jordi Pujol padre, algo que todavía falta ver lo que va a repercutir en los ciudadanos catalanes relativo al juicio que les merecía el “molt honorable” y sus acusaciones al Estado español de robar a los catalanes; unas palabras que para algunos pueden en estos momentos resultar extrañas ante lo que se ha sabido de este escurridizo personaje; parece que algunos sectores del pueblo español, algunos colectivos que no se conforman con el hecho de que sólo sean los partidos los que lleven la voz cantante en este tema, han decidido salir a la palestra para protestar ante el evidente inmovilismo del Gobierno respecto a los avances separatistas que cada día van adquiriendo mayor protagonismo.
El pasado 15 de Julio se dio a conocer, ante las puertas del Congreso de Diputados de Madrid, un movimiento ciudadano que se autodefinió como “Libres e Iguales”, que se manifiesta como opuesto a la independencia de Catalunya y reivindica los valores de la Constitución Española de 1.978. La firmante del manifiesto fundacional fue la señora Isabel Benjumea y ya han conseguido 15.203 firmas de adhesión. Entre los apoyos a esta plataforma cívica se encuentran el Nóbel de literatura Mario Vargas Llosa, el dramaturgo Albert Boadella, la diputada del PP Cayetana Álvarez de Toledo, el exdiputado socialista, Joaquín Leguina y el ex secretario general de los socialistas vascos Nicolás Redondo. Según sus convocantes esta plataforma no tiene ningún cariz político y sí patriótico.
Puede que sólo sea una chispa de patriotismo y puede que nadie se los llegue a tomar en serio pero, señores, para muchos españoles que todavía creemos en España, en sus leyes, en su Constitución y en su herencia romana y cristiana; el sentir que hay otros compatriotas que se mueven, que se hacen ver y se dan a conocer, nos sirve de consuelo y nos infunde ánimos, de modo que podemos llegar a tener la esperanza de que no todo está perdido y que puede que, entre tantos millones de ciudadanos, todavía queden muchos que sigan siendo buenos patriotas aunque, así como están las cosas y ante los ataques que desde los partidos de la izquierda y los separatistas se hacen en contra de nuestra Constitución y de la unidad de la nación, se hayan quedado un tanto sorprendidos y desorientados, cuando ven que el Gobierno se muestra tan reacio a enfrentarse a tales amenazas con la fuerza que le proporcionan las leyes.
Tenemos que denunciar la labor destructiva, los intentos de desestabilizar el país y algunas informaciones y encuestas publicados por algunos medios informativos, con el sólo objetivo de crear confusión y favorecer a determinadas formaciones políticas. Cuando, apenas hace unos días de que las encuestas del CIS hablaban de que, el PP, aventajaba en 8’8 puntos al PSOE; el País se ha sacado del bolsillo, solo unas fechas después, una encuesta afirmando que los socialistas del señor Pedro Sánchez ya han alcanzado al PP, del que sólo le separan unas décimas. Puede que, dentro de unos meses, el nuevo secretario del PSOE haya conseguido mejorar las expectativas de voto de su partido; pero que, a los pocos días de su elección, haya recuperado los casi 9 puntos de diferencia que le separaban del PP, hace dudar de la veracidad de la encuesta y pone en cuarentena una información que tiene todos los visos de estar falseada. O así es como, señores, desde la óptica de un ciudadano de a pie, vemos con esperanza reacciones como las de “Libres e Iguales”