Redacción Madrid. 24 de febrero. El líder del Likud, Benjamin Netanyahu, al que el presidente israelí, Simon Peres, ha encargado la formación del nuevo Gobierno, podría proponer nuevas condiciones a su directa rival y ganadora de las pasadas elecciones, Tzipi Livni, para que se sume a un Gobierno de unidad nacional.

En concreto, la líder del Kadima tendría potestad para marcar en qué condiciones se unirían otras formaciones al Ejecutivo.

   Netanyahu volvió a apelar ayer a la necesidad de unidad en Israel, pero el Kadima y el Partido Laborista, cuarta formación en número de escaños, han optado inicialmente por la oposición. Desde un primer momento se adelantó que la intención del Likud es darle una segunda oportunidad al Kadima para que se una al gabinete, y fuentes consultadas por el diario 'Haaretz' señalan que se ofrecería a Livni la potestad para decidir en qué condiciones se suma cada partido, ya que el poder que formaciones menores puedan tener en la futura administración es la principal queja de la ministra de Exteriores.

   Este gesto demostraría flexibilidad por parte de Netanyahu. Fuentes de ambos partidos señalaron que los dos principales líderes se reunirán por segunda vez el próximo viernes, aunque el entorno de Livni es pesimista respecto a que este nuevo encuentro vaya a dar sus frutos. "No tenemos grandes esperanzas", admitió uno de sus allegados.

   Livni declaró ayer que no cambiaría su premisa de "dos Estados para dos pueblos", en alusión a una posible solución al conflicto con los palestinso en Oriente Próximo. Livni consideran a Netanyahu "incapaz" de defender esta propuesta ante sus potenciales aliados de la extrema derecha.