Los chinos invaden Hollywood
José María Caparrós
El gigante dormido ha despertado en la vieja Meca del Cine. La segunda cadena más importante de los Estados Unidos, AMC Entertainment, ya es propiedad del gran país asiático. Concretamente, del Dalian Wanda Group, que posee el mayor número de salas en China.
La cadena de exhibición cinematográfica, que preside Wang Jianlin, ha comprado por 2.000 millones de euros los 5.034 cines que hasta ahora tenía la AMC en 346 multisalas de Estados Unidos. Dalian Wanda -grupo que también opera en hoteles, tiendas y otros negocios- ha previsto invertir 390 millones más para expandir la cadena en el país estadounidense, al tiempo que esta empresa china espera ejercer más influencia en las producciones que salgan de los estudios de Hollywood, con historias que tengan también valor comercial y cultural para los espectadores orientales.
De hecho, tal relación ya se inició con la película norteamericana Kunf Fu Panda 2 (en la foto). Con 520 millones de euros de recaudación, esta producción de Dreamworks se convirtió en la cinta de animación más taquillera de 2011, debido a la conexión temática con el público asiático. Tanto la firma hollywoodiense como la Walt Disney Co. dieron pasos antes en esta dirección por medio de otros proyectos con empresas chinas. Asimismo, la tercera parte de Iron Man tendrá elementos chinos al estar coproducida por una compañía de ese país. Con la compra de las pantallas de la AMC, Dalian Wanda Group se ha convertido en la cadena de cines más importante del mundo, pues controlaba 730 en 86 multisalas de China y espera llegar a dos mil en el año 2015.
Si ayer Hollywood “colonizaba” el mundo a través de sus películas y productos de consumo, ahora es el gigante asiático quien invade el mercado para “conquistar” al público que ya tiene diseminado por el mundo occidental.