El uso de productos ecológicos se ha alzado como una de las opciones más beneficiosas para nuestra salud, ya que son productos naturales y por tanto, saludables, que además se fabrican sin hacer daño al medio ambiente.

Por qué usar cosméticos ecológicos
Cada vez son más personas las que se unen al uso de productos ecológicos. Entre estos, los más conocidos son los productos ecológicos agrícolas (alimentación), aunque ahora podemos encontrar productos ecológicos de diversos tipos, tales como los cosméticos.

Los cosméticos ecológicos se fabrican a base de plantas que se cultivan de forma sostenible, sin añadir pesticidas ni sustancias químicas, por lo que se trabaja con ingredientes 100% naturales.

Si eres de los que prefieren usar productos de calidad, en www.econatura.net puedes encontrar una gran variedad de cosméticos ecológicos, tales como maquillaje, cremas, etc., que garantizan un cuidado óptimo de tu piel.

Hay muchas razones para decidirse por el uso de este tipo de cosmético, entre las que destacan en primer lugar motivos de salud, ya que estos productos no incluyen sustancias químicas que puedan dañar tu piel.

Los cosméticos naturales están se fabrican, principalmente, con ingredientes provenientes de plantas, lo que evita dañar al medio ambiente ya que se busca la reducción de emisiones de CO2 y del uso de químicos.

Eso hace que la piel los absorba más profundamente, con lo que los cosméticos ecológicos suponen un tratamiento más beneficioso, ayudando a mantener tu piel sana y contribuyendo a su cuidado de una forma más natural.

Asimismo, una de las principales razones para usar cosméticos ecológicos son valores éticos, ya que las cadenas que producen este tipo de cosmético aseguran  que en ningún momento se experimenta con animales probando los productos en ellos.

Beneficios de la cosmética natural
El mercado de la cosmética natural ofrece una gran variedad de productos que van desde la fabricación de cremas y lociones hasta la fabricación de geles, jabones e incluso dentífricos, por lo supone una alternativa real a los cosméticos industriales.

Como hemos dicho antes, una de las mayores ventajas de los cosméticos ecológicos es el hecho de que, al no usar sustancias químicas y trabajar solo con productos naturales, el tratamiento es altamente efectivo y podemos ver los resultados en poco tiempo.

Igualmente, con la aplicación de sustancias naturales nos aseguramos un buen cuidado de nuestra piel a largo plazo, ya que estas cuentan con distintos nutrientes, ácidos grasos y oligoelementos que frenan el envejecimiento de la piel.

Otra importante ventaja es que puedes fabricar tus propios cosméticos ecológicos en casa siguiendo sencillas recetas que no te llevarán más de cinco minutos, con lo que puedes ahorrar dinero, ya que los productos necesarios no tienen un precio excesivo.

Además, si compras productos ecológicos te comprometes con el medio ambiente y contribuyes a un comercio justo, ya que las empresas que trabajan con productos ecológicos siguen unas pautas de mercado comprometidas con valores sociales.

Entre otras cosas, estas empresas favorecen el mercado de cercanía, evitando la contaminación producida por el transporte de los productos. Además, fomentan el pequeño comercio y adoptan un sistema de precios justos.

Otro gran beneficio de este tipo de cosmética es que, al usar ingredientes que son más afines con nuestra piel, evitamos la posible aparición de alergias o efectos secundarios. Al contrario, nuestra piel lo agradecerá a largo plazo.

Cómo elegir cosméticos naturales
A la hora de comprar cosméticos ecológicos, es importante saber cómo podemos detectar si estos son productos realmente naturales. Por eso, aquí te explicamos qué criterios deberías tener en cuenta.
El primer criterio que debes tener en cuenta es la apariencia del producto. Los cosméticos ecológicos nunca serás de colores llamativos ni artificiales, sino más bien de colores claros que se asemejan a las plantas de las que se derivan.

El olor es otro criterio importante a tener en cuenta: existen marcas que ofertan productos con olores tales como melón, fresa…etc. Sin embargo, lo que realmente ocurre es que estos productos se fabrican con sustancias químicas que producen olor pero que no aseguran un tratamiento realmente natural.
También es importante extraer toda la información posible de la etiqueta de los productos. Como hemos dicho, en la cosmética natural no se hacen experimentos con animales, y las etiquetas de estos productos suelen tener algún tipo de aval que lo corrobore.

Por último, no debemos olvidar el hecho de que un precio excesivamente bajo puede ser sospechoso, ya que la elaboración de estos cosméticos depende de factores como cultivos y temperaturas, que hacen el proceso de fabricación más complicado y, por tanto, más costoso.
 
En definitiva, la cosmética natural te ofrece todo tipo de productos con los que cuidar tu piel y tu cuerpo de una forma sostenible para el medio ambiente y que garantiza un tratamiento de calidad con efectos visibles a largo plazo.