Tamara Laborda. 14 de Octubre.

    Después del desastre causado por las aguas en varios puntos de la región, han surgido diversas opiniones que culpabilizan a unos y a otros. El Ayuntamiento de Madrid ha negado que el nuevo desarrollo urbanístico de El Cañaveral tenga algo que ver con los destrozos causados por las aguas, pues su red de saneamiento está proyectada para efectuar sus vertidos hacia el sur, mientras que las inundaciones se produjeron en la vertiente contraria.

    Por otra parte, la Comunidad ha señalado a la reciente pavimentación de la parte de la Cañada Real Galiana como culpable de lo sucedido. Según algunas fuentes, en esta zona de la ciudad de Madrid ha habido un notable incremento de edificaciones sin las adecuadas infraestructuras. Aún así, Granados afirma que si la Comunidad tiene alguna responsabilidad “no se apartará de ella” y que hará “cualquier corrección que haya que hacer sobre las obras”.

     Ante esta situación,  Granados ha abogado por pedir a un despacho de ingenieros o arquitectos que elabore un informe técnico para determinar las causas de las inundaciones, a pesar de que tiene constancia de que tanto el consistorio madrileño como otros ayuntamientos afectados han encargado a sus técnicos estudios propios. Además, Granados resaltó que todo debe realizarse con la “mayor brevedad posible” porque “se pone en riesgo a la gente y en peligro los bienes materiales de los ciudadanos”, algo en lo que Aguirre está de acuerdo, pues según ésta podrían producirse “otras tormentas aún mayores”.

    Las delegadas de Urbanismo y Obras y Espacios Públicos del Ayuntamiento de Madrid se han reunido con Francisco Granados y con los alcaldes de San Fernando de Henares y Rivas Vaciamadrid para tratar estas cuestiones. Se ha pedido comprensión a los ayuntamientos porque no han tenido tiempo de realizar ninguna reforma desde la última riada, hace 20 días.