Iremos dando cuenta de todos los partidos cada lunes en esta misma columna pero comentar esta vez que los emparejamientos serán Tau-Iurbentia, Barça-Pamesa, Unicaja-Kalise y Real Madrid-Joventut. Esta última me parece la eliminatoria más igualada porque Tau, Barça y Unicaja han de estar en semifinales casi sin problemas. Otra cosa sería una sorpresa.

Llega el Joventut muy bien de forma y ganando espectacularmente al Fuenlabrada, que se quedó sin fase final. Llega, además, muy bien Ricky Rubio (16 puntos, 10 asistencias, 5 rebotes y 6 robos, el sábado) y eso es muy bueno para el equipo verdinegro ante un irregular Madrid que puede sufrir aunque debe hacer valer el factor cancha.

Las otras eliminatorias no deben ser dificultosas para los grandes y viendo, además, que el Tau y el Barça, que ya tenían todo hecho, le endosaron sendas palizas al Estudiantes y al Iurbentia en la última jornada. Son equipos que nunca se dan por vencidos, que nunca juegan a especular o a no cansarse. Juegan a ganar porque tienen ese don, ese gen. Ni Ivanovic, por cierto entrenador del año, ni Pascual entienden de relajación.

La última jornada trajo, además, el descenso del Cai a la Leb. Sólo le ha durado un año la aventura en la máxima competición tras diez años en el ostracismo. El sábado le ganó en casa un Murcia que se aprovechó de los errores del equipo maño, o más bien de Quinteros, que cometió dos faltas, una en ataque y otra en defensa en los últimos siete segundos de partido, que echó por tierra todo el trabajo previo.

Se salvan los murcianos y quizá el Menorca, que esperará a la resolución del caso Obradoiro, que con casi toda seguridad no podrá hacer frente a su plaza ACB por lo que los insulares se quedarán un año más en la élite.

PD1. Enhorabuena al Baloncesto Valladolid de Porfirio Fisac que subió el otro día a la ACB. Ha sido un viaje de ida y vuelta para fortuna de los castellanos.

PD2: En la NBA los Lakers han recuperado el factor cancha ante los Rockets, que han perdido a Yao por tres meses, por rotura de un pie. Aún así, los de Gasol no están finos, al contrario que Cleveland, que sí es favorito para el anillo