Jesús Domingo. El testimonio de Todos los Santos que hemos celebrado el pasado uno de noviembre nos plantea el reto de descubrir los caminos de la santidad ordinaria a la que todos estamos llamados. El Año de la Fe recién estrenado nos recuerda que es el encuentro con Jesucristo el que hace florecer nuestra humanidad en todas sus dimensiones.
Los santos fueron personas que, como nosotros, pasaron por tentaciones y dificultades, cometieron errores, sufrieron fracasos y pecaron, pero siempre volvieron a comenzar basados en el amor de Dios y la compañía maternal de la Iglesia que habían encontrado.