Redacción Madrid. 24 de abril.

La policía iraquí confirmó que un ataque suicida doble perpetrado en un lugar sagrado para los musulmanes chiitas en Bagdad dejó al menos 60 muertos, que se suman al saldo oficial de los ltimos cuatro años de violencia, publicado por el gobierno iraquí este viernes y según el cual han muerto más de 87.000 personas.

Por ser viernes, el día que el Islam dedica a la oración, el lugar se encontraba repleto de fieles de la confesión chiita, de forma que las atacantes maximizaron el efecto de las explosiones.

Entre las víctimas hay 25 peregrinos iraníes. Además unas 120 personas han resultado heridas, varias de ellas de gravedad.

El atentado se produjo apenas horas después que 80 personas murieran en la jornada más violenta en un año en Irak. El jueves, un par de atentados suicidas sacudieron la capital y la ciudad de Baquba.

El recrudecimiento de la violencia coincide con la publicación de nuevas estadísticas sobre el costo de la guerra en el país.

Cifras recabadas por el ministerio de Salud iraquí revelan que 87.215 iraquíes -tanto civiles como militares- fallecieron en circunstancias violentas entre enero de 2005 y febrero de este año.

Estos nuevos datos superan considerablemente las cifras registradas por el grupo Iraq Body Count. Y si se le agregan las muertes de 2003 y 2004, pasan los 110.000.

Estos guarismos son mínimos y no se están considerando los miles que fueron secuestrados y desaparecieron, o murieron y fueron enterrados sin quedar registrados en ninguna parte.

Pero aún siendo incompletas, las cifras del ministerio dan una pauta y son una buena guía de cuál puede ser el saldo verdadero de un conflicto que aún no termina.