Las principales marcas chinas de smartphones como Xiaomi o Meizu están consiguiendo, cada vez, una mayor aceptación en el mercado occidental. El motivo no es otro que el de ofrecer interesantes prestaciones a precios mucho más bajos que las principales marcas del sector. La mayor parte de estos móviles cuentan con Android, un sistema operativo basado en Linux.

Lo interesante de este sistema es que, pese a que la mayor parte de la gente lo maneja a diario, muchos desconocen todo lo que puede dar de sí. Existen, de hecho, trucos para Android en la red con lo que podemos, por ejemplo, liberar memoria y así contar con más espacio en nuestro móvil. Para esto podemos deshacernos del caché acumulado, de las descargas que ya no necesitemos o subir archivos pesados a la nube. Pero hay muchos más.

El hecho de que Android se haya convertido en el sistema operativo más utilizado se debe, sobretodo, a que es un sistema gratuito, de fácil manejo y multiplataforma.

Este sistema ofrece las interfaces necesarias para poder desarrollar todas las funciones del teléfono (como el GPS) con un lenguaje de programación sencillo y conocido, el Java. Por si fuera poco, existen herramientas extra de programación, totalmente gratuitas, con las que poder satisfacer todas las necesidades del usuario.

Como es lógico, al ser de acceso libre, los costes de lanzamiento del teléfono son menores y, por tanto, más competitivos. Así que Android es el preferido por los fabricantes por el ahorro que supone y porque lo pueden adaptar a su gusto, así como corregir posibles errores.

Como era de esperar desde China tratan de hacerse con un hueco en el sector. Y, efectivamente, ellos también emplean Android en la mayoría de sus modelos para abaratar costes. De las marcas más destacadas hay una de ellas que se lleva la palma: se trata de Xiami.

El gigante asiático ha apostado por móviles de gama alta, que rondan los 425 euros, como es el caso de Xiaomi Mi5. Pero incluso en móviles de menor presupuesto podemos estar seguros de que se trata de productos de garantía de calidad y plena confianza. Todos ellos funcionan a la perfección.

Se mire por donde se mire, desde América hasta Asia, Android arrasa. Por el momento el resto de sistemas no suponen competencia. Tan sólo en España la abrumadora cifra del 93,3% de los smartphones vendidos cuentan con Android.