Montilla cree que el federalismo del PSC no creará ningún problema a Zapatero
El primer secretario del PSC y presidente de la Generalitat, José Montilla, negó hoy que avanzar hacia un Estado federal, como proponen varios puntos de la ponencia oficial que saldrá del XI Congreso de los socialistas catalanes que hoy finaliza en Barcelona, signifique crear problemas al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
En declaraciones a la Cadena SER, Montilla expuso su sorpresa por la importancia que han dado los periódicos con sede en Madrid a este asunto, ya que "no es noticia para la prensa catalana", aseguró.
"Respecto a este tema, reafirmamos nuestros postulados tradicionales", dijo Montilla, quien recordó que, históricamente y desde su creación hace 30 años, los socialistas catalanes siempre han abogado por un modelo de Estado federal. Algo que pasa, para el partido, por reformar la Constitución y avanzar en la descentralización y, al mismo tiempo, en convertir al Senado en una auténtica cámara de representación territorial.
Montilla aseguró que la posición del PSC "no difiere del socialismo español ni la del gobierno español", puesto que hace un par de años, el Ejecutivo central encargó al Consejo de Estado un dictamen "para posibilitar la reforma de la Constitución con esta orientación" que defienden los socialistas catalanes. "Considero que no tenemos diferencias sustanciales con el PSOE respecto a la posición tradicional del PSC", añadió.
Sobre financiación, Montilla volvió a expresar que "habrá que afinar" las bases del nuevo modelo de financiación de las comunidades autónomas de régimen común --todas salvo las forales, Euskadi y Navarra--, que esta semana presentó el vicepresidente segundo del Gobierno central y ministro de Economía, Pedro Solbes.
Recordó que "parte de la música" no gusta ni al PSC ni al Govern, y que "habrá qué ver cómo avanza la partitura, qué letra tiene". Recordó que su posición no difiere de la de otros dirigentes socialistas autonómicos, "que no están tampoco entusiasmados" ante las bases que propone Solbes, aunque expresó su confianza de que, finalmente, se alcanzará un acuerdo.
Apostó por un nuevo modelo de financiación que garantice los "mismos derechos" de todos los ciudadanos españoles, independientemente de la comunidad autónoma donde residan, ya que, aseguró, todos deben recibir las mismas prestaciones en servicios públicos. Recordó que es lógico que las comunidades más desarrolladas a nivel económico aporten a la solidaridad interterritorial, pero que no tiene que haber diferencias en la calidad de los servicios públicos entre territorios.
Al ser preguntado sobre si, con su voluntad de alcanzar la "centralidad" política en Catalunya, el PSC descuidará su dimensión más progresista, Montilla recordó: "Somos de izquierdas, catalanistas y socialistas, lo que significa tener un lenguaje y unas propuestas adaptadas a la sociedad donde vivimos".
Un reto que tiene que afrontar, "de manera de la sociedad", un partido como el PSC, que es de Gobierno y quiere "seguir gobernando a la inmensa mayoría de la sociedad" de Catalunya, por lo que tiene que "ser capaz de abrirse hacia nuevos sectores, recoger nuevas sensibilidades territoriales y sectoriales, y ser capaz de ser un gran partido desde posiciones inequívocamente progresistas y de izquierdas".