Redacción Madrid. 17 de Octubre.

   El secretario de Relaciones Internacionales del PP y coordinador de la Presidencia, Jorge Moragas, admitió hoy su "inclinación" personal por el candidato demócrata a la Casa Blanca, Barack Obama, cuyo discurso sobre las clases medias en tiempos de crisis, afirmó, es igual que el de los 'populares'.

   En su 'blog' en Internet, un día después del tercer y último debate en televisión entre Obama y el candidato republicano, John McCain --que ha servido al demócrata para asentar su ventaja sobre su rival--, Moragas recuerda que la "apuesta" que ha hecho el PP con respecto a las elecciones en Estados Unidos ha sido "por la democracia americana y por respetar y respaldar lo que decidan los ciudadanos americanos".

   Esta postura de "no cometer la estupidez de confundirse con el cuerpo electoral americano", subrayó, ha sido la "posición oficial" expresada tanto por el líder del partido, Mariano Rajoy, como por su secretaria general, María Dolores de Cospedal y por él mismo, único político español que asistió a las convenciones de los dos partidos en las que se designó oficialmente candidatos a Obama y McCain.

   Pero dicho esto, señala Moragas, otra cosa son "las sensaciones, las preferencias o simpatías personales hacia uno u otro candidato que puedan expresar libremente" los dirigentes políticos.

   Es en este punto donde el responsable 'popular' confiesa, "seguramente por afinidad generacional", que le ha sido "muy difícil disimular" su inclinación por el candidato demócrata "y sobre todo, por su moderna maquinaria de movilización en red".

   "Pero con el debate de ayer y la apelación a las clases medias en tiempos de crisis que hizo Obama, hoy ya no tengo ninguna duda. Cuando aquí decimos que hay que defender a las PYMES, a las familias y a los autónomos, estamos diciendo lo mismo", argumentó.

   Moragas concluye augurando que, igual que en Estados Unidos "toca cambio y esperanza", mañana pasará en España "lo mismo". A juicio del responsable del PP, McCain ha reaccionado "tarde" ante Obama, a quien se tenía que haber "enfrentado de verdad hace un mes en el primer debate".