No habrá nuevas subidas de tipos de momento, dice Trichet
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, reiteró hoy que los riesgos al alza para la inflación a medio plazo "se han intensificado en los últimos meses", y explicó que este fue el motivo que llevó a la autoridad monetaria a subir los tipos de interés hasta el 4,25% la semana pasada.
No obstante, Trichet se declaró convencido de que el actual nivel de tipos permitirá garantizar la estabilidad de precios, con lo que parece descartar más subidas a corto plazo.
"Los riesgos al alza para la estabilidad de precios a medio plazo persisten en 2008 y se han intensificado en los últimos meses", dijo Trichet en una comparecencia ante el pleno de la Eurocámara. Estos riesgos, explicó, están relacionados con posibles subidas adicionales de los precios del petróleo y de los alimentos, incrementos imprevistos de los impuestos indirectos y los precios administrados y efectos de segunda vuelta sobre salarios y precios.
El presidente del BCE alertó de que el nivel de precios se mantendrá "muy por encima" del objetivo del 2% marcado por la autoridad monetaria "durante algún tiempo" y sólo se moderará "gradualmente" en 2009.
Por este motivo, Trichet justificó la decisión del Banco del pasado 3 de julio de subir los tipos de interés un cuarto de punto, hasta el 4,25%. "Esta acción subraya la fuerte determinación del Consejo de Gobierno para evitar efectos de segunda vuelta y mantener las expectativas de inflación a largo plazo firmemente ancladas en línea con la estabilidad de precios", dijo a los eurodiputados.
A su juicio, esta es la mejor contribución que puede hacer el BCE para "preservar el poder de compra a medio plazo y apoyar el crecimiento sostenible y el empleo en la eurozona".
"Tras la decisión de la semana pasada de subir los tipos, según el análisis actual del Consejo de Gobierno, la posición de la política monetaria contribuirá a lograr la estabilidad de precios a medio plazo", subrayó Trichet, dando a entender así que no habrá nuevas subidas, al menos a corto plazo. No obstante, añadió que el BCE "seguirá vigilando de cerca todos los acontecimientos".