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Diario YA


 

Para aprender inglés con eficiencia, te aconsejamos que combines la teoría y la práctica

Si os habéis decidido a aprender inglés, entonces os vamos a dar una serie de consejos a través de los cuales vais a poder combinar adecuadamente tanto la teoría como la práctica, consiguiendo de esta forma una mejor consolidación de todo lo que vayáis aprendiendo.
 
Si quieres aprender a hablar inglés de forma fluida, es muy importante que dediques un tiempo cada día al nuevo idioma, pero sobre todo debes ser consciente de lo esencial que es el combinar adecuadamente la teoría y la práctica, de manera que conseguirás avanzar mucho más rápidamente y, sobre todo, el proceso será mucho más agradable y natural.
 
Un poco de teoría para estructurar bien las ideas
 
Está claro que para poder dominar adecuadamente un idioma es esencial que dediquemos tiempo a la teoría, ya que a través de ella vamos a entender mejor el funcionamiento y el modo en que se estructura.
 
Muy especialmente cuando vamos a empezar con un nuevo idioma, es necesario que tengamos en cuenta algunas particularidades teóricas que serán las que nos irán guiando poco a poco y paso a paso para poder llegar un momento en el que estructura hemos las frases por nuestra cuenta.
 
Esto significa que deberemos empezar desde la base conociendo el modo en que se va a desarrollar el aprendizaje, pero es muy importante que no nos obsesionamos con la teoría, ya que la práctica va a ser la que verdaderamente nos va a permitir alcanzar el nivel adecuado no sólo a la hora de entender el idioma, sino también en el momento en el que necesitemos expresarnos y tengamos que mantener una conversación fluida con otra persona, de manera que, si tan sólo prestaremos atención a la teoría, esa fluidez se perdería y, aunque hablaríamos de un modo muy correcto, en realidad estaremos dejando muchas lagunas y evidentemente nuestro interlocutor al final acabaría por no entendernos del todo.
 
La práctica, el elemento indispensable para seguir avanzando
 
Cuando aprendemos un idioma de forma materna, evidentemente no lo hacemos estudiando la teoría, es decir, nuestros padres nos enseñan palabras y frases cortas y poco a poco vamos ampliando nuestros conocimientos, y todo ello lo hacemos a través de la práctica, pero en ningún momento se ponen a explicarnos a tan tierna edad que son los verbos o dónde va el adjetivo, el sustantivo, etc.
 
Por esa razón, si queremos conseguir tener un buen nivel de inglés y aprender con una buena soltura y eficacia, entonces es esencial que seamos conscientes de que la práctica va a ser nuestra herramienta principal, de manera que, aunque nuestra recomendación es que compartáis el tiempo entre teoría y práctica, en realidad vale la pena dedicar más tiempo a esta segunda puesto que es la que verdaderamente nos va a ayudar a poder movernos con mayor soltura.
 
Está claro que la teoría sigue siendo necesaria, ya que de lo contrario cometeríamos muchos errores, y precisamente cuando nos ponemos a analizar el modo en que se debería estructurar una determinada frase que nos resulta más complicada, es la teoría la que nos salva la situación, y en caso de desconocerla, el hecho de haber practicado mucho no nos va a ayudar a conseguir la estructura correcta, o al menos nos puede hacer seguir teniendo muchas dudas al respecto.
 
No obstante, la teoría la debemos tener en cuenta sobre todo a la hora de tener que realizar un análisis con detenimiento, pero el resto del tiempo lo ideal es que hablemos con la máxima soltura, y esto se consigue precisamente a través de la práctica, además de que por supuesto también estamos hablando de la mejor forma de disfrutar durante el aprendizaje, y es que no hay nada mejor que ir manteniendo conversaciones, independientemente de nuestro nivel, con alguien que sepa un poco más que nosotros para que nos pueda ir corrigiendo y por supuesto para disfrutar del nuevo idioma de una forma mucho más divertida.