Pasos para independizarte en un piso pequeño en Madrid
Apuntarnos al gimnasio, volver a estudiar inglés, comer verduras tres veces a la semana, recuperar la escritura de nuestro diario personal… Estos podrían ser algunos de nuestros propósitos para el 2018. Y uno más que, sin duda, supondrá un cambio drástico en nuestras vidas: marcharnos a vivir solos a un piso.
Bien porque llevemos demasiado tiempo con nuestros padres, bien porque estamos cansados de compartir casa con amigos o desconocidos, la mudanza a un inmueble con una sola habitación se convierte para muchos, tarde o temprano, en una necesidad. Una vez aceptada, la incertidumbre es inevitable: desconocemos en qué barrio habitaremos o cómo serán los caseros, lo único seguro es que va a ser un piso pequeño. A continuación, resumimos los pasos para encontrar apartamento en Madrid y convertir este en un hogar.
Comparar, en el momento oportuno y el lugar adecuado
Hay unas fechas mejores que otras para buscar alojamiento. Así, el momento propicio para ello suele ser el verano y, si acaso, los primeros meses del año, coincidiendo con la marcha de los estudiantes. Ahora bien, ¿en qué barrio buscar? En este sentido, hay que tener claro que Madrid es una ciudad heterogénea en lo que al alquiler se refiere. Mientras distritos como Arganzuela o Fuencarral son relativamente económicos; el precio se dispara en otros como Centro o Salamanca. A este respecto, los principales portales inmobiliarios (Idealista, Vibbo, Fotocasa, etc.) representan buenas herramientas para visualizar el plano de oportunidades de la urbe.
No te lleves todo a tu nueva casa
Uno de los errores que solemos cometer al mudarnos es tratar de transportar con nosotros todas nuestras pertenencias. Pensemos que las dimensiones del nuevo piso serán considerablemente menores que las de nuestro antiguo hogar. Por lo tanto, lo más conveniente es bien dejar algunos objetos en este último, bien contratar un servicio de almacén donde sean custodiados. Es el caso del alquiler de trasteros en globalbox.es, cuyos centros en Madrid capital, Arganda, Móstoles y Parla ofrecen espacios asequibles, con amplitud de horarios y elevadas condiciones de seguridad y limpieza.
El arte del almacenamiento
Pensar en vertical se antoja la filosofía más oportuna para gestionar el espacio en un piso pequeño. Es decir, debemos entender las paredes como recursos aprovechables y no tener miedo apilar. Nos referimos, por ejemplo, a disponer estantes sobre los que colocar libros, platos o tazones. También a instalar soportes o barras metálicas para colgar la bicicleta; o incluso magnéticas, para los artículos de cocina. Asimismo, los colgadores para puertas se terminan agradeciendo.
Por otro lado, a la hora de amueblar la casa seleccionaremos productos que cuenten con espacio interno. Hablamos de mesitas o bancos huecos, así como de camas con cajones o somieres que puedan transformarse en sofás. Otra idea para la habitación es montar la televisión contra la pared, en lugar de usar una mesa. Por último, las puertas correderas concederán más sensación de amplitud que aquellas que emplean bisagras, además de poseer un valor estético incuestionable.