Washington. La campaña de Mitt Romney para la presidencia de los Estados Unidos acaba de lanzar un vídeo dirigido especialmente a los votantes católicos, en el que se pone de relieve que la protección de la libertad religiosa será “piedra angular” del gobierno alternativo del candidato republicano, según ha declarado Paul Ryan, congresista y candidato a la vicepresidencia del partido.
Ryan ha señalado que “los norteamericanos necesitamos un presidente que apoye nuestros derechos otorgados por Dios, no que trate de burlarlos”.
Este video diferencia de manera significativa la campaña entre los candidatos demócratas y republicanos. Como es sabido, hace nueve meses, el Gobierno de Barack Obama, actual Presidente de Estados Unidos, aprobó un plan dirigido al Departamento de Salud y Servicios Humanos de la nación, según el cual se obliga a la mayoría de grandes empleadores, incluyendo muchas instituciones católicas, a proveer cobertura en esterilizaciones y anticoncepción, incluyendo algunos medicamentos abortivos, para sus trabajadores.
La exclusión del mandato se aplica a empleadores que principalmente emplean o sirven a sus correligionarios, y no cubriría a las caridades, universidades y sistemas de salud católicos, que emplean y sirven al público en general.
Las organizaciones que no estén exentas deben cumplir el mandato, o dejar la cobertura del seguro y pagar otras multas, o enfrentar multas de no cumplimiento de 100 dólares por empleado al día.
La controversia generada en todo el país por la imposición de una manera de pensar. Ha sido rescatada por Ryan, quien afirma que “La libertad religiosa es nuestra primera libertad y no hay otra garantía más preciosa que el derecho al libre ejercicio de la religión” y prosigue, “Los católicos ven la fe como más que un derecho individual, más bien, para los católicos, la fe es una parte vital de nuestra comunidad”.
Además, el candidato a la vicepresidencia de la Casa Blanca reconoce la labor desinteresada que los católicos ofrecen a la sociedad estadounidense, cuando afirma que “Celebramos el único rol que nuestra Iglesia tiene en cuidar a los estadounidenses de todos los credos. Las caridades católicas y hospitales ofrecen servicios que sostienen nuestra sociedad”.
Para Ryan, el Presidente estadounidense Barack Obama ha “atacado estas instituciones indispensables virtualmente desde el momento en que asumió el cargo”. Por ello, instó a los católicos a sumarse a la campaña de Romney: “Juntos, aseguraremos que nuestra fe y nuestras tradiciones sean protegidas para nuestros hijos y por las generaciones venideras”, señaló.
La campaña de Obama también ha realizado un esfuerzo por cautivar el voto católico. El grupo “Católicos por Obama” se ha enfocado en la seguridad económica y asuntos de política externa.
La web de “Católicos por Obama” no parece encontrar en la campaña de 2012 las bases y los argumentos sólidos capaces de ‘convencer’ a los católicos de la nación norteamericana, ya que, a diferencia de los manifiestos en Internet que realizaron durante la campaña de 2008, en esta ocasión no intenta presentar un perfil del presidente estadounidense, que apoya firme y abiertamente el aborto legal y el matrimonio homosexual.