Redacción Madrid. 4 de enero. Al menos 35 palestinos y un militar israelí han muerto desde que se iniciara, en la noche de ayer, la invasión israelí de la Franja de Gaza. En total, desde que comenzara hace nueve días la operación 'Plomo Sólido', han muerto unos 510 palestinos y 2.250 más resultaron heridos, según fuentes palestinas. Cinco israelíes, dos de ellos militares, han muerto en el mismo periodo de tiempo en ataques de las milicias palestinas, según Tel Aviv.

   El Ejército israelí asegura que decenas de milicianos de Hamás han muerto desde el inicio de la incursión por tierra en la Franja, mientras que un soldado murió y 31 más resultaron heridos, al menos uno de ellos de gravedad.

   El fallecido pertenecía a la brigada de infantería Golán y cayó en una zona densamente poblada del campamento de refugiados de Jabalya, en el norte de la Franja. En ese mismo incidente un segundo soldado del Ejército hebreo resultó gravemente herido y fue evacuado al hospital de Soroka, en Beer Sheva.

   El Ejército israelí empleó con profusión el fuego de carros de combate, artillería y aviación para dar cobertura al avance de la infantería.

   Los bombardeos aéreos israelíes acabaron con la vida de una mujer y sus cuatro hijos. Los civiles palestinos quedaron destrozados por la potencia de la explosión, registrada en el edificio en el que residían, en el barrio At Toufah de Ciudad de Gaza. Dos de los hijos de la mujer, apellidada Baker, tenían tan sólo uno y dos años cada uno, según fuentes médicas palestinas.

   Por otra parte, el bombardeo de una zona cercana a una mezquita de la región de Jabaliya costó la vida a otros cinco civiles palestinos. Los cinco fallecidos, uno de ellos una menor, de 14 años, eran miembros de la misma familia y viajaban en el mismo coche, que fue bombardeado por el Ejército israelí.

   Los bombardeos israelíes también habrían afectado a varios dirigentes de Hamás como Husam Hamdan, responsable de la infraestructura de lanzamiento de cohetes 'Qassam' en la localidad de Jan Yunés, que resultó herido.

   Mohamed Hilo y Mohamed Shalfuh, miembros de las fuerzas especiales de Hamás que colaboraron en la construcción y el disparo de cohetes 'Qassam' desde Jan Yunés también resultaron heridos en el mismo ataque.

   En el aspecto táctico, el Ejército israelí parece haber logrado partido en dos el territorio de la Franja de Gaza y ahora se dispone a rodear las ciudades más grandes de la zona en un nuevo paso de la segunda fase de la operación 'Plomo Sólido'. Fuentes palestinas han informado de intensos combates entre milicianos y soldados israelíes en las afueras de Ciudad de Gaza.

   El objetivo es separar el norte, donde se encuentra Ciudad de Gaza, del resto de la Franja. Según fuentes palestinas, la división va desde el paso de Karni, en el centro de la frontera oriental de la Franja con Israel, hasta el mar.

   El antiguo asentamiento de Netzarim, al sur de Ciudad de Gaza, podría haber sido el punto elegido por Israel para funcionar como eje de la operación, ya que, según la televisión Sky News, unos 150 carros de combate israelíes se encuentran desplegados en este antiguo asentamiento israelí.

El presidente israelí, Simón Peres, rechazó hoy cualquier posibilidad de alto el fuego, pero insistió en que el objetivo del Ejército israelí no es reocupar la Franja de Gaza.

   "No pretendemos ni ocupar Gaza ni aplastar a Hamás, sino aplastar el terrorismo. Hamás necesita una lección real y seria. Ahora la están tomando", afirmó Peres en una entrevista a la televisión estadounidense ABC News.

   Peres descartó un alto el fuego con los palestinos. "No aceptaremos la idea de que Hamás siga disparando mientras declaramos un alto el fuego. No tiene ningún sentido", indicó. "Fuimos cuidadosos. Nos contuvimos. Esperamos. Les dimos muchas oportunidades", explicó Peres.

   "No pueden explicar por qué disparan (...) y no pueden ocultar que actúan a las órdenes de Irán. Irán tiene dos satélites en Oriente Próximo: Hezbolá en Líbano y Hamás en Gaza", aseguró.