El pasado 14 de mayo paso algo insólito en el panorama político aragonés, y por ende español, PODEMOS, partido político que se ha posicionado como totalmente opuesto a VOX y también a la tauromaquia, votó a favor en las Cortes de Aragón de una enmienda taurina de este último, en la que se instaba a no dejar morir a la cabaña brava de Aragón y su importante tejido productivo en esta comunidad.

La unión del sector taurino aragonés provoco hacerse oír y generar concienca en la sociedad y en la política aragonesa, al ser su situación derivada de la crisis del COVID19 insostenible, pues de las 55 ganaderías de Aragón, el 80% de sus ingresos se forjan del alquiler de sus reses en los más de 2.200 espectáculos taurinos populares que se celebran en Aragón anualmente, y que debido al Estado de Alarma y a las restricciones se les ha privado de su derecho laboral, teniendo gastos sumamente importantes para mantener viva la riqueza genética de estas ganaderías.

Ramiro Domínguez, diputado de Ciudadanos Aragón fue el primero en abrir el melón, y llevar al parlamento aragonés una defensa pasional, y que se hizo muy viral, sobre la importancia económica y social de los festejos taurinos populares en Aragón, los cuales generan alrededor de 30 millones de euros de impacto económico en la región.

El diputado de Ciudadanos puso voz al sector de cría de reses de lidia en las Cortes de Aragón, y a raíz de ello, el resto de grupos se hicieron partícipes de la situación crítica en la que se había dejado a los ganaderos aragoneses y a los 650 trabajadores que de manera directa dependen de ellos.

VOX, semanas más tarde y con el debate puesto en la calle y en los medios de comunicación, presento una enmienda no de ley en las Cortes de Aragón, para ayudar al sector ganadero aragonés, que fue aprobada en su totalidad por todos los partidos políticos, VOX, PP, CIUDADANOS, PSOE (que en Aragón se caracteriza por apoyar a la tauromaquia), PAR, CHA y sorprendentemente hasta por PODEMOS que a nivel nacional y en Aragón se ha mostrado totalmente contrario a la tauromaquia.

De los siente puntos presentados, salvo el número tres, todos saldrán adelante, en parte gracias al trabajo unido del sector taurino en Aragón, que ha sido capaz de ponerse en valor y ser apoyado por el gran porcentaje de la política aragonesa quien no ha sido ajena a la importancia social, productiva, económica y cultural que supone sobre todo en el entorno rural y que une a tantas localidades y personas a lo largo de la geografía aragonesa.

Ramiro Domínguez, apelaba, al igual que el diputado del Partido Popular, Ramón Celma, a que la tauromaquia no entiende de ideologías políticas y que estaban contentos de que se aprobaran acuerdos que beneficiasen a los ciudadanos más allá de los colores de cada partido.

Las próximas semanas, quien también se hiciera viral al defender con transversalidad la tauromaquia en las Cortes de Aragón, Ramón Celma, presentará otra iniciativa de apoyo al sector taurino de Aragón ante esta crisis.