Carlos Pascual. El nuevo VW Polo, tras su pequeño reestiling, ha añadido nuevos motores TSI con mejoras sobre los ya implementados antes. La unidad que se puso a nuestra disposición fue el 1.2 TSI de 110cv de potencia máxima; con el equipamiento advance, que añade ciertos elementos a su equipamiento básico; y conlleva un sobrecoste de 3000€ respecto a la versión edition, la más básica; además de ser una unidad de 5 puertas.

Al encontrarnos el Nuevo Polo nos damos cuenta de la introducción en la gama un innovador diseño de iluminación. Volkswagen ha rediseñado completamente la versión superior de los faros del Polo convirtiéndolos en faros full-LED, lo que representa una novedad en la gama y en todo el segmento. Los vanguardistas faros dobles full-LED, con numerosos detalles, son inconfundibles incluso desde lejos por su llamativo diseño y sus concisos reflectores. La luz de los faros full-LED es aún más blanca y más parecida a la luz diurna que la de los faros xenón. Gracias a esto, los ojos del conductor requieren menor esfuerzo durante la conducción nocturna. Los faros full-LED estarán disponibles para las versiones Polo Advance, Sport y GTI.

Además de estos detalles, en la zaga, se acentúa su nuevo paragolpes con forma de trapecio, lo que extiende el dinamismo que podemos apreciar a primera vista. Los reflectores traseros, desplazados a los parachoques, le confieren, asimismo, un aspecto más robusto. Y los faros traseros se han rediseñado completamente.

En cuanto a su conducción, el Nuevo Polo, mantiene una buena posición de conducción con unos nuevos asientos, muy cómodos incluso para desplazamientos largos proporciona un confort sorprendente; en las plazas traseras, si alguien necesita más espacio que el de un niño de doce años irá un poco apretado, no así en el espacio para la cabeza.

Lo referente al motor, como nos tiene acostumbrado el fabricante alemán en sus TSI, muestra un empuje lineal y constante desde el primer momento apreciándose una ligera mejora desde las 2500rpm en adelante que unido a una caja de cambios que quizá posee unas relaciones de cambio muy largas, claramente en busca de la mejora de los consumos respecto a las prestaciones, aún con ello el Polo mantiene una excelente dinámica de conducción, a pesar de montar una suspensión que busca más el confort que la deportividad, dado que este paquete de equipamiento está enfocado hacía ello, no habría nada de objetar salvo que en frenadas fuertes se balancea ligeramente el eje posterior.

El dinamismo al que hago referencia, es palpable desde el primer momento, rápido y directo, transmite bastante bien aunque la dirección se muestra muy ligera para ir rápido y la suspensión no ayuda, en carreteras reviradas se hace confortable y agradable. En ciudad es más cómodo que en carretera abierta, es su terreno; donde el polo nuestra más que en ningún otro lugar para lo que ha sido pensado.

En resumen es un utilitario, cómodo, ágil, mantiene unos consumos bajos, como primer vehículo o segundo coche es ideal para las grandes ciudades y poder realizar algún viaje en un momento dado.