Redacción Madrid.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, confirmó este martes la nominación de Sonia Sotomayor como nueva juez del Tribunal Supremo. De ser confirmada por el Senado, Sotomayor será la primera hispana en ocupar un asiento en la máxima corte del país y reemplazará a David Souter, quien hace dos semanas anunció su retirada.

"He decidido nominar a una mujer inspiradora que, creo, será una gran juez de la Corte", indicó Obama al hacer el anuncio.

El mandatario dijo que quería un jurista con "sentido común y de la compasión" y que buscó mucho antes de decidirse por la magistrada hispana, que llegó a ser juez federal gracias al nombramiento del presidente George Bush (padre).

Sotomayor, de 54 años, es de origen puertorriqueño y creció en el Bronx, uno de los barrios más pobres de Nueva York. Actualmente ejerce como juez de apelaciones del Segundo Circuito de Nueva York.

Se graduó en la Escuela de Leyes de Yale en 1979 y estudió en la Universidad de Princeton.

Fuentes de la Casa Blanca dijeron a la BBC que, en caso de que el Senado la confirme, Sotomayor será la integrante del Tribunal Supremo que más experiencia haya acumulado en cortes federales.

Será además la segunda mujer presente en este tribunal, al lado de Ruth Bader.

Sotomayor era el nombre que más sonaba para reemplazar a Souter. La Asociación de Abogados Hispanos, cuyos representantes se reunieron con Obama este mes, ya consideraba como "una posibilidad real" la nominación de un hispano para el máximo tribunal.

El mandatario estadounidense había dicho que su postulante sería "alguien con una mente aguda y brillante, con historial de excelencia e integridad". "Buscaré a alguien que entienda que la Justicia no es sólo acerca de teorías legales abstractas", dijo Obama, repitiendo la opinión que expresara varias veces como candidato.

Los nueve jueces del Supremo son designados de por vida. De los actuales, cuatro son considerados liberales (incluyendo al saliente Souter), cuatro conservadores y uno no alineado. Sotomayor se uniría al primer grupo, de modo que no se alteraría el equilibrio político en el tribunal.