"Propinilla" para Cataluña
Fina Millán. Barcelona.
Mala conciencia debe tener Zapatero - o quizás alguna "deuda" que no ha pagado aún- cuando ha encontrado en su chistera 800 milloncejos de nada para regalar ¿o comprar? a Cataluña.
Si la cosa fuera limpia, podríamos estar contentos, pensando en que por fín en Cataluña se nos solucionarían algunos problemas reales: infraestructuras, ineficacia, burocracia, sectarismo, educación, sanidad, inmigración, pobreza, paro... ¡Pero no! Yo no estoy satisfecha. Muy al contrario, tengo "la mosca detrás de la oreja".
"Calla, calla", me dirá alguno... "pájaro de mal agüero", "desconfiada"... "aguafiestas", dirían otros... Más yo sigo con mi run-run... porque me temo que esos 800 milloncejos no van a servir más que para elevar el ego infantil y cacique de los gobernantes catalanes.
¿Se imagina alguien la cantidad de "embajadas", y demás zarandajas - a beneficio de los políticos de turno, claro - que se pueden hacer con 800 millones, sin control y sin transparencia? ¿Se imagina alguien la cantidad de hermanos/as, primos/as, cuñados/as, sobrinos/as, consuegros/as, amiguetes/as de los que gobiernan o manejan Cataluña, van a vivir el resto de sus vidas a costa del sufrido y dócil pueblo catalán.
Por eso, no me siento felíz. Zapatero ha añadido OTRO error, OTRO despropósito, OTRA injusticia a las muchas que viene cometiendo desde que llegó al gobierno. Es de esperar que algún día España en su totalidad, una vez recuperada su dignidad, deje de ser la pobre concubina del poder y se convierta en un "hueso" que se le atragante al presidente. Amén.