Redacción Madrid. 1 de febrero.

    Un tanto de Raúl, que pasó a la historia, y otro de Robben permitieron al Real Madrid sumar su sexta victoria consecutiva en el Campeonato Nacional de Liga ante un Numancia que mereció más, pero que no pudo frenar la eficacia blanca, que le da licencia para seguir segundo a la espera de lo que haga el 'todopoderoso' Barcelona ante el Racing.

   El Real Madrid, que ofreció un fútbol bastante pobre, sufrió de nuevo la ausencia de Guti en el centro del campo. Los de Juande se atascaron siempre en el último pase y necesitaron de la astucia del capitán --que igualó a Di Stéfano como máximo goleador de la historia meregue-- y de su mejor activo, el holandés Robben para ganar en Soria.

   El jugador tulipán, ex del Chelsea, no se cansa de desbordar, centrar y aparecer para facilitar a los suyos el trabajo. Robben tras una gran jugada personal sentenció el partido a los 54 minutos de fuerte disparo porque antes, a los tres de la reanudación, Raúl había hecho lo que mejor sabe hacer.

   El capitán empujó a gol un rechace del meta numantino Juan Pablo, que sólo pudo repeler un tiro de Higuaín. El '7' sacó la caña y llevó los pulgares a su espalda. Juande respiró con alivio y cruzó los dedos esperando un pinchazo culé en Santander que le dé algo de vida a una Liga descafeinada.

   El Madrid no hizo mucho más a parte de lo de siempre. Casillas salvó el posible tanto local en un mano a mano con Goiria y Gago terminó expulsado a diez del final por doble amonestación. Los blancos suman de tres en tres, pero no terminan de disfrutar con el balón en los pies, cosa que sí hace su eterno rival.

   LLORENTE HACE SOÑAR AL ATHLETIC

   Por su parte, el Athletic de Bilbao olvidó por un momento el éxito copero, que le ha metido en semifinales de 'su' trofeo, para frenar en seco (3-2) al Málaga en un partido trepidante, con goles y muchos detalles de calidad. Y es que los vascos se llevaron el triunfo en los últimos minutos gracias a un cabezazo de Markel Susaeta.

   Albert Luque, tras un rechace, inauguró el marcador para los andaluces que, de haber ganado hubieran dormido en puestos de 'Champions', todo un premio para el fútbol atrevido de Antonio Tapia y los suyos. Sin embargo, su rival demostró esa rabia que tanto le gusta a su técnico Joaquín Caparrós para seguir bañándose de gloria.

   Yeste igualó el partido con un lanzamiento perfecto a pase de Llorente a diez minutos del descanso, pero el Málaga se volvió a adelantar merced a un cabezazo de Lolo a pase de1 Duda --el mismo que provocó el tanto de Luque--. El 1-2, cuando restaba media hora, no tumbó a los leones que enseñaron las garras de forma espectacular.

   Llorente, el faro de los rojiblancos, levantó a 'la Catedral' con un zurdazo increíble que significó el empate, y Susaeta, de cabeza, puso la guinda con el 3-2 y los tres puntos que permite a los bilbaínos soñar con Europa, un dulce demasiado goloso después del sufrimiento de estas temporadas atrás.