Redacción Madrid. 18 de junio. El presidente del G-14, Pedro Pérez, advirtió hoy de que el sector inmobiliario podría sufrir un problema de desabastecimiento en cuatro años si no se toman medidas para reactivar las ventas de viviendas, que podría disparar los precios. Pérez lamentó el "aplauso continuado" que recibe esta situación sin que se acompañe de "ningún comentario de preocupación".
En su intervención en un curso sobre la profundidad de la crisis que se celebra esta semana en Santander, organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), Pérez explicó que en este momento el ritmo de iniciaciones es de 150.000 viviendas al año y alertó de que este nivel "está cayendo", con lo que el próximo año alcanzará una situación "ridícula". Mientras, hay 350.000 viviendas en construcción. Por su parte, la demanda estable se sitúa en torno a 400.000 viviendas anuales y el 'stock' en 750.000.
Todo esto, unido a los desajustes entre la vivienda en alquiler y en propiedad, el presidente del G-14 alertó de que en cuatro años "podríamos encontrarnos con la sorpresa de que haya desaparecido 'stock' y el ritmo de construcción sea inadecuado para dar respuesta a la demanda".
Además, "ahora los precios caen, pero seguramente podremos encontrarnos con una situación verdaderamente paradójica", avisó. Por eso, reclamó a las autoridades que tomen "acciones oportunas" para "estabilizar esta caída e iniciar la recuperación".
Pérez advirtió de que las ventas de viviendas cayeron en abril más de un 40% respecto al mismo mes del año pasado, que se suma a una bajada similar registrada un año antes, por lo que "no acabamos de encontrar un suelo que nos permita vislumbrar un horizonte mejor en el medio plazo", subrayó.
El presidente del G-14 explicó que la demanda estable de viviendas en España es superior a la de otros países como Alemania, Irlanda o Francia porque cada vez hay más hogares monoparentales, como consecuencia de que los jóvenes tardan más en independizarse, y de las separaciones matrimoniales, además de que hay más costumbre de adquirir una segunda vivienda.
En cuanto a los precios, Pérez subrayó que desde el techo alcanzado en diciembre de 2007, han caído en promedio más de un 20%, alcanzando el 30% en algunas zonas costeras del Mediterráneo. Sin embargo, no aclaró si hay margen para bajar más los precios. "El ajuste es importante, incomparable con ningún otro" ocurrido en el pasado, señaló.