Redacción. Desconcierto, puede definir el pensamiento de muchos católicos al conocer la felicitación emitida por el Arzobispo de Madrid y Presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) Cardenal Antonio Mª Rouco Varela al Rey Don Juan Carlos con motivo de su 75 cumpleaños. Asociación Cruz de San Andrés hace una valiosa aportación que nos recuerda hechos objetivos que no debemos olvidar y que publicamos a continuación. Al final hay un enlace donde podrá manifestar su disconformidad.
Pero ¿Cuáles son los “motivos de inspiración” a los que refiere nuestro Cardenal Antonio Mª Rouco? ¿En cuál de las leyes que ha firmado el actual Jefe del Estado durante su reinado, hemos de inspirarnos los católicos españoles?
¿A haber firmado la Ley de Despenalización del Aborto de 1985, la Amnistía de terroristas de sangre, a la despenalización del adulterio, la Ley del Divorcio, la Legalización de la Blasfemia, la de las Técnicas de Reproducción Asistida, la las Uniones Homosexuales, la del “Divorcio Express”, la de Educación para la Ciudadanía, la del
Aborto de Zapatero?.. o quizás al notable “progreso” económico que todos disfrutamos, gracias al Sistema Político que él preside?
Contrariamente a lo que muchos opinan, la Iglesia no necesita llevarse bien con
el Poder Político y menos, cuando este es despótico y asesino, como es el caso: Los NAZIS asesinaban judíos, los comunistas disidentes y las democracias liberales, a sus propios hijos no natos.
Esta es la verdadera separación que debe de existir entre iglesia y Estado:
No se trata de evitar que el pueblo católico pida y cree leyes inspiradas en nuestra confesionalidad, de lo que se trata es de que la Iglesia (especialmente su jerarquía) no se contamine ni rebaje la Verdad de su mensaje, por confraternizar con el Poder Político y menos, cuando este firma leyes directamente
contra natura.
¿Y acaso no es confraternizar o rebajar nuestro mensaje, alabar el “reinado” de quien ha firmado sin poner objeción alguna la Ley de Despenalización del Aborto de 1985, la Amnistía de Terroristas de Sangre, a la Despenalización del Adulterio, la Ley del Divorcio, la Legalización de la Blasfemia, la de las Técnicas de Reproducción Asistida,
la de las Uniones Homosexuales, la del “Divorcio Express”, la de Educación para la Ciudadanía, la del Aborto de Zapatero?...
La Nueva Evangelización da un importante papel a los laicos y el Código de Derecho Canónico en su artículo 212, asegura que “los fieles tienen el derecho, y a veces incluso el deber, de manifestar libremente a los Pastores sagrados, su opinión sobre aquello que pertenece al bien de la Iglesia”.