Rigidez o eficacia educativa
Fernando Villar Molina. El Tribunal de Justicia de Andalucía ha suspendido cautelarmente un Decreto de la Consejería de Educación por el que suspendía el concierto a varios colegios de nuestra comunidad, por no ser de educación mixta.
Es difícil entender esta actitud de la Consejería, que pretende uniformar a los colegios, al exigirles que para obtener el concierto educativo han implantar en sus aulas la educación en régimen mixto y no diferenciado. No sé qué criterios habrá tenido en cuenta para tomar esta rígida determinación. Sólo desde posiciones político-ideológicas se puede entender.
Los estudios serios efectuados sobre los dos sistemas recogen puntos fuertes y débiles, aunque se va inclinando por el sistema de educación diferenciada, por atender mejor las necesidades de los alumnos/as. Por esto, son cada vez mayor el número de países que están permitiendo en la escuela pública la coexistencia de clases de un solo sexo. En EEUU la administración Obama se ha decantado por un sistema de educación que acoge las dos opciones, facilitando de esta manera la libertad de elección de los padres. Esto mismo ocurre en otros países de nuestro entorno: Inglaterra, Alemania, Francia, Australia…etc.
En el caso que estamos viendo, en el que la Consejería manifiesta la opción de enseñanza mixta. Hay que considerar que en un Estado democrático, como ocurre en otros países , su misión es proponer una oferta educativa amplia y competitiva ,sin rigideces, ni imposiciones pedagógicas dogmáticas, con leyes educativas consensuadas y realistas, en la que los padres puedan elegir con libertad el tipo de enseñanza que quieren para sus hijos; en un sistema público que englobe tanto a la enseñanza promovida por las instituciones del Estado, como la que tenga su origen en la iniciativa privada. En la que los poderes públicos, no sean beligerantes y ocupen el papel que le corresponde en la planificación, control, exigencia de calidad y eficiencia del sistema educativo.
Llevamos veinticinco años de autonomía y desgraciadamente las estadísticas que se publican, no nos sitúan en los puestos de honor. Mucho tiene que ver esto con nuestro sistema escolar.