San Juan y el nacional laicismo apropiándose de las fiestas y del Santoral Católico
Fidel García Martínez. La nueva ideología política quiere imponer el nacional laicismo apropiándose de las fiestas y del Santoral Católico, para proclamar su vacío existencial y su nihilismo ideológico- genérico. Algunos quieren reinventar el solsticio de verano. Un caso paradigmático de este neo-paganismo es la festividad de San Juan Bautista, 24 de Junio. La grandeza de este personaje bíblico histórico excepcional fue reconocida por el mismo Jesucristo quien afirmó. “entre los nacidos de mujer no ha habido uno mayor que su Precursor y Bautista”.
Efectivamente, Juan es un personaje revolucionario tanto en la teoría como en su praxis vital; rompe con los esquemas culturales y religiosos de su tiempo. No es ningún zelota terrorista revolucionario, ni un fariseo moralista o un saduceo materialista. Vive alejado de la espiritualidad del templo de Jerusalén. Mora en el desierto, bautiza en el río Jordán y predica un bautismo de conversión ante el inminente juicio apocalíptico de Dios, que se manifestará como fuego destructor, si no se produce una conversión de la vida depravada. La vida de Juan acaba de forma violenta por la denuncia de la corrupción de reyes adúlteros y poderosos. Hoy como ayer los poderosos piden la cabeza de los que osan, como Juan, denunciar la corrupción moral e ideológica.
La autentica y tradicional Noche de San Juan siempre la han celebrado los españoles a su manera, sin imposiciones oficialistas, como lo exigía Jovellanos en su defensa de los espectáculos públicos sin intromisiones innecesarias. El gran Dramaturgo Alejandro Casona plasmó este ambiente popular en su célebre drama La Dama del Alba, integrando reflexiones existenciales sobre el sentido de la vida y de la muerte. La acción transcurre en una aldea rural de la Asturias profunda, su natal Besullo. Casona se sirve de una riqueza literaria-realismo mágico- centrada en metáforas, comparaciones, sinestesias y símbolos. el trébol; tradiciones musicales tomadas de la riqueza de canciones populares típicas y propias de la Noche de San Juan; así como de un léxico autóctono alejado de las convenciones oficialistas. La muerte es representada como una peregrina, compañera y amiga. El drama queda abierto a la transcendencia del más allá. Si hay muerte es porque lo primero es la vida. Son muchos los españoles- ellos y ellas- que celebran hoy la onomástica de su Santo Patrono: JUAN(ES) Y JUAN(AS).