Fidel García Martínez DOCTOR FILOLOGÍA ROMÁNICA LICENCIADO CIENCIA ECLESIÁSTICAS.

La elección por la UNESCO, agencia de la ONU para la ciencia y la cultura, de Teresa de Lisieux como personalidad mundial de la cultura para el bienio 2022-2023 ha supuesto una conmoción en los medios  culturales. No faltan presuntos intelectuales escépticos  que ven algo raro y extraño que una mujer francesa, que murió a los 24 años sin hacer aparentemente nada extraordinario llamativo, porque su vida  transcurrió en pequeñas ciudades francesas y la mayor parte  en la clausura  rigurosa de un convento de Carmelitas Descalzas de Lisieux. 

Algunos  se asombra que  se puede comparar y poner al mismo nivel la vida de esta monja católica con otros dos personajes,  el canónigo-sacerdote Nicolás Copérnico, quien revolucionó la Astronomía, o el fraile agustino Gregor Mendel, padre de la Genética. Esta elección que puede extrañar a quienes apenas  conocen la vida de la Iglesia Católica y mucho menos la Orden de Carmen y su Reforma por Santa Teresa y San Juan de la Cruz.

Esta extrañeza desaparece cuando se profundiza en la  personalidad  de esta joven monja carmelita descalza: Santa Católica, Doctora de  lglesia, patrona de las Misiones Católicas, heroína en Francia, como Juana de Arco, Doncella de Orleans.  Santa Teresita del Niño Jesús y de la Santa Faz, como la gustaba llamarse, está reconocida mundialmente por pruebas  irrefutables como son su grandes valores literarios: escritora brillante de la Francia moderna: poeta, dramaturga, pero sobre todo por su autobiografía Historia de un alma, que ha tenido una prodigiosa difusión en todos os países y son millones los lectores, creyentes  o no, que han visto en estas Confesiones, según el modelo de Agustín, o la el Libro de la Vida de Santa Teresa de Jesús,  un testimonio especial de una mujer extraordinaria.

Además por numerosas cartas de gran valor testimonial la edición de sus Obras Completas ha tenido numerosas ediciones, más de 80 millones de ejemplares, un verdadero éxito  editorial. Las razones por las que la UNESCO ha declarado a Teresa de Lixieu como personalidad mundial relevante de la ciencia y de la cultura, no agotan todas las dimensiones de  su personalidad. Para la UNESCO  la razones para esta elección se basan  en criterios de ciencia, educación, cultura.  Razones   poderosas  son: la valoración de la mujer como generadora de cultura  humanista y la influencias educativas que sus escritos. Pero Santa Teresita tiene  otra dimensión cultual y devocional, para el Papa Pío XI es la mayor santa de los tiempos  modernos: millones de personas  llegadas de las más remotas partes del mundo llegan  al Santuario  de Lisieux, el más visitado de los santuarianos  de Francia, después del de Lourdes.
 Teresa de Lisieux es un valor universal en la historia de la humanidad.  Su humilde y atractiva  persona encarna el humanismo integral de los grandes pensadores del Siglo XX  y además el  más puro del autentico Cristianismo; es un testimonio de la  existencia de Dios-Ternura como no se cansa el Papa Francisco de proclamar;  siempre a favor de los más pequeños, humildes y descartados.  De un Dios misericordia que espera a los hijos fieles, a los descarriados y a los incrédulos y ateos.