Lo que muchos no saben. Hay reconocidos hasta 47 dialectos del español. desde el madrileño hasta el chilote, el andino o el rioplatense y jergas como el cheli. 
La Virgen pidió la construcción de una capilla para meditar la pasión de su hijo “tan olvidada de los hombres”
Se construye una capilla en Prado Nuevo, el lugar de las apariciones de El Escorial
Covadonga. Fue el 14 de Junio de 1.981 cuando, en la finca de “Prado Nuevo” de El Escorial, la Virgen María se apareció por primera vez a Luz Amparo Cuevas. Así se iniciaron las conocidas "apariciones de El Escorial". La Virgen se presentó como la “Virgen de los Dolores” sobre la copa de un fresno situado junto a una fuente. Pidió que se construyera allí una capilla que llevara por nombre “Capilla de Nuestra Señora de los Dolores”, en su honor, para meditar la Pasión de su Hijo, “tan olvidada de los hombres”. Y habló de curaciones a través del agua de la fuente, así como de bendiciones para los que fuesen hasta allí para rezar el Santo Rosario. Muchos serían además marcados con una cruz en la frente.
Finalmente, Antonio María Rouco, Arzobispo de Madrid, ha dado su aprobación para la construcción de la capilla solicitada por la Virgen de los Dolores y en el lugar exacto indicado por ella. El 7 de mayo se impartirá una ponencia en Prado Nuevo sobre la construcción de la capilla, que se bendecirá después de la misa
Luz Amparo Cuevas nació en Pesebre (Albacete) en el seno de una familia muy humilde, en 1.931. Desde muy pequeña invocaba a la Virgen, ya que no sabía rezar. Casada y madre de siete hijos (uno fallecido) ha sido la persona que ha recibido los mensajes de la Virgen durante muchos años, hasta el 4 de Mayo de 2.002, día en que El Señor anunció: «Sólo pido, hijos míos, que meditéis todos los mensajes, que todo se va cumpliendo (...).
No habrá más mensajes, pero habrá bendiciones muy especiales y marcas que quedarán selladas en las frentes (...).
Acudid a este lugar, hijos míos, que todos seréis marcados y bendecidos con bendiciones muy especiales; y meditad todos los mensajes».
Prado Nuevo se ha convertido en un lugar de oración y recogimiento, donde se reúnen personas de diferentes países, peregrinos. El Santo Rosario se reza todos los días, y el Vía Crucis los viernes. El primer sábado de cada mes se reza a las 5 de la tarde un Rosario masivo.
Es importante destacar “Las apariciones de El Escorial” de José María Zavala, el primer libro de investigación sobre el tema, publicado en noviembre de 2011. El autor entrevistó por primera vez a todas las personas del entorno más próximo a la vidente, ya muy mayor y con problemas de salud. Recogió además muchos testimonios sobre ciertos fenómenos como estigmas, bilocaciones, introspección de conciencias, etc.
También nos cuenta Zavala que muchas personas han descubierto a Dios o han aumentado su fe en prado Nuevo. Las apariciones han provocado incluso la conversión de algunas personas.