Redacción Madrid. 13 de febrero. La Reina Doña Sofía presidió hoy en Madrid el acto de presentación del Atlas Cronológico de la Historia de España, la primera obra de referencia de carácter normativo, elaborada por la Real Academia de la Historia. Esta obra "única y de referencia" incluye, por primera vez en papel, 14.000 hitos históricos que también estarán disponibles en Internet.

   Alrededor de 120 expertos han trabajado en esta obra a lo largo de más de dos años, redactada y supervisada minuciosamente por los académicos de la Real Academia de Historia. La obra cuenta con documentación inédita, sobre todo en lo que se refiere a la cartografía, más de 600 ilustraciones y más de 300 mapas creados en exclusiva para la obra, distribuida en 446 páginas, que se podrán consultar también Internet, a través de la página www.atlasache.es

   En la Red se pueden realizar búsquedas por fecha, periodo, tema, personaje y localización, lo que "hace que sea distinta al permitir cruzar variables de tiempo, lugar y espacio a los que la mente humana no es capaz de llegar". De momento, sólo será posible el acceso digital a quienes adquieran la obra impresa, donde hallarán unas claves de acceso, aunque en unos "años el camino digital será el único".

   La obra cubre un vacío en la producción historiográfica española y abarca desde la Prehistoria hasta las elecciones generales de marzo de 2008. La realización de este trabajo ha permitido rectificar algunas fechas, descripciones de batallas y definiciones "como la de la Armada Invencible que, en realidad, era la Gran Armada". Las revisiones y actualizaciones del ACHE se realizarán periódicamente, lo que la convierte en una obra abierta.

   Durante el acto de presentación, el director de la Real Academia, Gonzalo Anes y Álvarez de Castrillón, destacó que en la elaboración del Atlas se ha cuidado que el texto que acompaña a cada fecha sea "escueto, y sin adjetivos" para evitar "la subjetividad que impregna las publicaciones sobre el pasado". Los hitos no se suceden según las clasificaciones convencionales al uso, sino que las fracciones temporales varían en función del desarrollo histórico, haciéndose cada vez más pequeñas y con un análisis cada vez más pormenorizado.

   A este respecto, Carmen Sanz, académica de número de la Real Academia de la Historia, afirmó que "ignorar la cronología y hacer historia sin fechas, sin periodizaciones y sin una construcción de estratos temporales sucesivos en los que situar los acontecimientos, es condenarse a confundirlo todo y a no comprender nada". Además, Sanz destacó la importancia de "la elección de ilustraciones y mapas históricos como complemento pedagógico imprescindible para enriquecer el resultado".