Tendencias y utilidades de los tatuajes
Los tatuajes no están hoy en día tan demonizados como hace unos años, cuando solo se atribuía a pandilleros y rebeldes sin causa. Sin embargo, preguntas como si alguien puede ser despedido por llevar tatuajes visibles en su piel todavía salen a la palestra cuando hablamos de estos dibujos hechos en tinta.
Las empresas siempre tendrán la última palabra a la hora de decidir si contrata o despide a un empleado por llevar tatuajes, en el caso de que éstas mantengan un código concreto de apariencia por un motivo u otro, y aún cuando el empleado tiene derecho a tomar decisiones personales. Un ejemplo conocido es la compañía aérea British Airways, que incluso pide a sus trabajadores no llevar ropa interior que pueda marcarse o transparentarse cuando se lleva el uniforme. Por supuesto, tampoco nada de tatuajes.
Aún cuando es muy probable ver tatuajes en personas todos los gremios profesionales, sí que es cierto que hay estudios que relacionan tatuajes con conductas violentas, y que la ausencia de ellos tiende a humanizar a las personas. Así lo reveló el experimento social de un fotógrafo inglés que retiró digitalmente todos los tatuajes de ex pandilleros convictos en Estados Unidos. El resultado estremeció a los propios protagonistas.
Usos médicos de los tatuajes
Al margen de sus usos estéticos y de las connotaciones que puedan tener, los tatuajes también pueden funcionar como aliados, especialmente la técnica de la micropigmentación. Pongamos de ejemplo a una mujer que acaba de ser sometida a una mastectomía. La mastectomía total consiste en la completa extirpación del seno, y es habitual en mujeres que han padecido cáncer de mama o que presentan un riesgo alto de padecerlo (recuérdese el caso de Angelina Jolie). Lamentablemente, puede presentar consecuencias psicológicas. Muchas de las mujeres que son sometidas al proceso se sienten incapaces como compañeras sexuales, rehuyen las relaciones íntimas.
La mastectomía afecta a la autopercepción de la mujer hasta el punto de poder desembocar en depresión, sobre todo si la pareja tampoco reacciona de la manera apropiada. El portal salud.ccm.net apunta incluso que un 25% de los casos pueden aparecer ideas de suicidio.
La reconstrucción mamaria puede terminar con resultados decepcionantes porque el seno reconstruido no es igual al otro. La micropigmentación oncológica o reparadora puede ser un revulsivo para la autoestima perdida de la mujer, y del impacto positivo que causa en su psicología hablan las clínicas especializadas en esta técnica.
Consiste en la realización de unas pruebas previas para estudiar el color y la tolerancia, para luego realizar la pigmentación de la areola y, tras el prediseño correspondiente, diseñar el pezón en 3D, de manera que se le otorga volumen y textura para que, aun siendo plano, parezca real.
Últimas tendencias en tatuajes
El anterior es un ejemplo de cómo pueden tener efectos positivos, a lo que podríamos sumar los tatuajes informativos que tienen por objeto informar a los profesionales sobre alguna enfermedad grave como el VIH, y evitar así errores médicos. Pero, además, llevar un tatuaje puede tener sus efectos positivos en la psicología de alguien, para quien ese dibujo permanente puede tener un significado muy especial, como de cambio. Claro está, hay que madurar la idea bien.
El objetivo de hacerse el tatuaje debería tenerse claro. Si es por pura estética o por moda, hay que recordar que no se trata de colgarse un bolso nuevo, sino de algo que se llevará toda la vida. Algunos tatuadores, por ejemplo, han confesado que odian realizar el símbolo del infinito porque por mucho que se busque un diseño original con plumas, pájaros o nombres, no lo es.
Tatuajes originales, diferentes e impactantes son, por ejemplo, los que recogen motivos del tarot y, más especialmente, los del tarot del amor. No son videntes todos los que los llevan, y ni siquiera hace falta creer en esta fórmula adivinatoria. Se trata de puro simbolismo, de dibujos complejos que pueden ir en tinta negra o en color y que no dejarán indiferente a nadie. Eso sí, es mejor ponerse en manos de un buen profesional para no salir del estudio con una chapuza.
El color va ganando cada vez más fuerza en los tatuajes, y se imponen técnicas como la de acuarela que hace quien lo lleva ser portador de una obra de arte. Siempre y cuando, repetimos, esté bien hecho.