Testifican mañana ante el juez los amigos de Álvaro Ussía
Redacción Madrid. 30 de noviembre.
Los amigos de Álvaro Ussía testificarán mañana, a partir de las 12.00 horas, ante el juez de Instrucción número 43 de Madrid, José María Casado, para relatar lo sucedido la madrugada del pasado 15 de noviembre en la discoteca ya clausurada El Balcón de Rosales, donde el joven de 18 años falleció tras recibir una brutal paliza supuestamente a manos de Antonio S.S. y dos porteros del local.
En las comparecencias, los jóvenes ratificarán las declaraciones prestadas a lo largo de la pasada semana ante el Grupo V de Homicidios de la Policía Nacional. Algunos de los amigos del fallecido presenciaron su asesinato, sin poder hacer nada al ser retenidos por los vigilantes de seguridad que participaron en el crimen.
Los chicos declararon en sede policial que los porteros lanzaron al joven sobre una barandilla y lo arrastraron por las escaleras. Tras ello, Antonio S.S. le hizo un barrido para inmovilizarle y le dio una paliza. Acto seguido, se tiró a plomo sobre su pecho, rompiéndole las costillas y el pericardio.
El sumario sobre la muerte de Ussía recoge que el incidente que se produjo en el interior del local se inició por una riña que mantuvo Álvaro con un amigo. "Como consecuencia de la ingesta de alcohol, Álvaro bromea con Rafael L., a quien empuja, impactando con una chica rubia", señala el sumario. Tras ello, los porteros intervinieron para expulsarlos de la sala.
"Dentro del local, un portero le dio un gancho en el rostro a Álvaro y le sacó", relató un testigo sin identificar al vigilante. "Lo sacaron bruscamente, arrollando a la gente con una violencia desproporcionada", especificó otro testigo. Otro joven contó que un vigilante irrumpió en la pista de baile y arrojó al suelo a Miguel H.S., uno de los amigos de Ussía.
En el exterior del local se encontraba el primo de Álvaro, a quien le mandó un SMS para que saliera para irse a casa porque vivían juntos en un chalet de Aravaca. "Vi a dos porteros sacar por la fuerza a mi primo y a Rafael", explicó el joven a la Policía. Según Rafael, "cuatro porteros se lanzaron contra él. Uno le hizo un barrido y lo tiró al suelo. Dos se retiraron y otros dos le patearon la cabeza".
"Los porteros lanzaron a Álvaro por encima de una barandilla, lo arrastraron por las escaleras. En el suelo, le golpearon en la cabeza y le patearon todo el cuerpo", relató otro de sus amigos, quien añadió: "El autor de la agresión, un chico calvo, le hizo una llave marcial y le golpeó". Este testigo participó en las ruedas de reconocimiento practicadas el pasado lunes en las que identificó a Antonio Sánchez, manifestando con nerviosismo en la misma sala: "ese es el que se tiró encima y le rompió el pericardio".
La prima de Álvaro, con la que también vivía, relató a la Policía que un portero golpeó a su primo en la cabeza, por lo que se dio un golpe con una barandilla. "Dos vigilantes le sujetaron por los brazos y le hicieron un barrido. Le patearon la cabeza, el costado y la barriga". Ya inconsciente, según manifestó Rafael, "los porteros se ausentaron del lugar de manera precipitada".
Al ver a Álvaro tendido en el suelo, su primo llamó al 112 para alertar de lo ocurrido. Entretanto, dos socorristas que se encontraban en la discoteca trataron de auxiliar al joven. A su llegada, los sanitarios intentaron reanimarlo durante una hora, sufriendo dos paradas cardiorrespiratorias. Murió en el hospital por "rotura cardiaca traumática".