Aunque la seguridad y la salud debería ser lo primero en los centros de trabajo, lo cierto es que en ocasiones se descuidan. Esto ocurre sobre todo en las pymes, sobre todo, en las que se dedican a la construcción. Por lo tanto, es necesario reforzar la sensibilización sobre la salud en el trabajo. En este sentido, invertir en la prevención de enfermedades profesionales es beneficioso a largo plazo.

No son necesarias inversiones muy elevadas

Las pymes son empresas que salen adelante con mucho esfuerzo, de forma que les cuesta hacer inversiones destinadas a que sus trabajadores tengan una mejor salud. En ocasiones, esto ocurre por desconocimiento, pues los aspiradores industriales no son caros y con ellos los trabajadores que se dedican a la construcción están mucho más cómodos.

Uno de estos aspiradores profesionales, como los de la marca Festool, evita que los pintores, los alicatadores, o aquellas personas que pasan el día lijando aspiren una gran cantidad de polvo que termina en sus pulmones.

No siempre se sabe con qué materiales se está trabajando, en especial en las reformas de viviendas con años a sus espaldas, así que los aspiradores industriales CTM 26 E AC, CTM 36 E AC y CTM 36 E AC HD ayudan mucho en este aspecto.

Festool los vende con depósitos de dos volúmenes, 28 y 36 litros. Sus filtros consiguen que todo el polvo termine dentro del depósito y no dispersado por el ambiente.

Las bajas laborales afectan más a las empresas pequeñas

El uso de estas herramientas de aspirado es solo una de las medidas que se pueden tomar, las cuales interesan más a las pequeñas empresas, ya que son las más afectadas cuando un trabajador tiene que parar por cuestiones de salud.

Según los datos extraídos del IKK classic Report 2018 de Alemania, más del 50 % de las bajas laborales que se dan en los oficios artesanales (como la construcción) pasan de los 42 días.

Esto es un problema muy serio para este tipo de negocios, pues tienen que sustituir a un trabajador válido y con experiencia. Además, ahora no es nada sencillo encontrar empleados cualificados. Hay que recordar que es necesario seguir pagando el salario de la persona que está de baja, así que la inversión que no se hace en seguridad se realiza después por partida doble.

Evaluar los riesgos y tomar medidas

¿Cómo se mejoran las condiciones de trabajo con el fin de evitar lesiones y enfermedades profesionales? Antes de actuar es imprescindible hacer una auditoría, la cual será la que nos diga si es necesaria la compra de aspiradores u otras herramientas similares.

Una vez que se evalúan los riesgos a los que están sometidos, los empleados llega el momento de ponerse manos a la obra, con medidas que vayan encaminadas a aumentar la seguridad y la salud laborales.

Aquí es fundamental implicar a los trabajadores, hay que hacerles ver que esos cambios no se llevan a cabo para fastidiarlos, sino que van encaminados a que su salud sea mejor. De hecho, con el fin de que todo el proceso sirva de algo, es necesario implicar a todo el personal desde el principio.