Una Casa Limpia; Una Casa Saludable
¿De qué sirve habitar una casa llena de lujo, pero sin la limpieza mínima necesaria? Vale más vivir en una casa modesta, pero limpia, que en una mansión desaseada, aún disponiendo de las herramientas para limpieza. La comodidad no solo la proporciona un piso de mármol, una cama king, o una cocina espaciosa, sino el tiempo que le dediquemos al aseo. No es que sea un capricho, sino que un hogar limpio es sinónimo de vivir en un lugar saludable.
Son muchísimos los beneficios que nos proporciona una casa aseada, más allá de aquellos ligados con la buena apariencia y el orden. Cuando somos responsables en mantener nuestra morada limpia, conseguimos unos cuantos beneficios relacionados a la salud:
Reducir el estrés y la fatiga
Cuando vivimos en un lugar desordenado y sucio, consciente o inconscientemente nos pasa por la cabeza en todo momento de que hay trabajo por hacer. Además, también se genera un cansancio visual y fatiga porque la vista no encuentra ningún lugar a donde descansar. Esto, sin duda alguna, causa un gran estrés. El estrés puede alcanzar niveles muy altos, especialmente cuando no conseguimos lo que estamos buscando. ¡Vaya que es una situación desesperante! Una casa ordenada, aunque implica trabajo, nos permite estar más relajados.
Reducir las posibilidades de alergias y asma
El polvo es uno de los principales responsables de las alergias y crisis asmáticas, especialmente cuando hay niños. Áreas como el sótano, garaje o armarios son las más propensas a estar sucias, pero también las alfombras, sofás, almohadas y colchones. Estos últimos son lugares con los que mantenemos contacto a diario. Las aspiradoras son una excelente herramienta de limpieza para ayudar a combatir el polvo y cuidarnos las vías respiratorias.
Evitar enfermedades
¿Qué parte de una casa crees que posee la mayor cantidad de gérmenes? Aunque muchos dirán que el baño, resultará irónico que no sea este. De hecho, el que debería ser el lugar más aseado, a la vez está muy propenso a contaminarse: Esta es la cocina. Así es. La razón es que sobran los lugares donde se puede quedar atrapada el agua y donde salpica la comida por todos lados.
La temperatura y la humedad propicia el ambiente ideal para la proliferación de bacterias, especialmente en pañitos de cocina y en las esponjas. Por lo tanto, la recomendación es utilizarlas de un material que soporten agua caliente para esterilizarlas periódicamente.
¿Te has enfermado del estómago y no sabes por qué? Alegas que estás comiendo sano y casi nunca comes en la calle. Pues, quizás tu cocina necesite una limpieza profunda. La mayoría de las enfermedades gastrointestinales se transmiten gracias al contacto entre el alimento y una cocina con poco higiene.
Siempre vale la pena invertir en herramientas para la limpieza, porque es la mejor manera de vivir en un hogar limpio. ¿Ya cuentas con una aspiradora robot? Puedes averiguar los mejores ejemplares en las guías de productos y empezar a hacer de tu hogar un lugar más saludable para ti y para tu familia.