UPyD ya no es necesaria
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Redacción Madrid. 6 de marzo.
El PSE-EE obtuvo 140 votos de los vascos residentes en el extranjero, con lo que superó ampliamente los 62 que precisaba para hacerse con el escaño número 25, ya que EA tan sólo recabó seis apoyos fuera del Estado, y perdió el segundo parlamentario. '
Según datos oficiales de la Junta Electoral de Alava, facilitados a Europa Press, el partido que más votos obtuvo del extranjero fue el PNV (146), seguido del PSE (140), PP (83), EB (16), UPD (12), Aralar (7) y EA (6). El Partido por un Mundo más Justo consiguió seis sufragios y el POSI, tres.
Gracias a estos reslutados, los socialistas vascos arrebataron a EA el escaño número 25 en el Parlamento vasco, por lo que Rafa Larreina no formará parte del próximo legislativo vasco, mientras que Esozi Leturiondo, viuda del histórico dirigente del PSE-EE Mario Onaindia, formará parte del grupo socialista en la Cámara autonómica.
El vigesimoquinto escaño permitiría al PSE-EE, con los votos de los 13 parlamentarios populares, sacar adelante, en primera vuelta, la investidura de Patxi López como lehendakari, al contar ambos con los 38 votos que exige la mayoría absoluta.
"LOS VOTOS DEL PP SON LEGÍTIMOS"
El secretario de Organización del PSE-EE, Rodolfo Ares, advirtió hoy de que "los votos de PP son tan legítimos como los de cualquier otro" y más que "los de los radicales" que respaldaron a Juan José Ibarretxe en su investidura como lehendakari. Además, pidió al PNV "serenidad" y "altura de miras" para "arrimar el hombro desde la oposición", y le preguntó si ahora va a hacer "política irresponsable" en Madrid.
En una entrevista concedida a Radio Popular, recogida por Europa Press, Ares manifestó que los socialistas "seguirán defendiendo la transversalidad, el acuerdo entre diferentes y el diálogo con todos para construir el país y respetando la pluralidad".
"Es casi un insulto y es cinismo que ahora el PNV hable de transversalidad cuando han defendido a lo largo de los últimos años la acumulación de fuerzas nacionalistas para intentar imponer al conjunto de esta sociedad un proyecto nacionalista. Buscaron permanentemente los votos de los radicales abertzales, de quienes amparan la violencia terrorista, no sólo para sacar adelante sus planes, como el Plan Ibarretxe y la consulta, sino para que Ibarretxe fuera elegido lehendakari", dijo.
Por ello, recomendó al presidente del PNV, Iñigo Urkullu, "un poquito de tranquilidad, de serenidad y que no intente confundir a la gente". Según aseguró, el PSE-EE "ama y comprende la pluralidad de la sociedad vasca", por lo que no tienen "ningún interés en trabajar para asimilar y para que avance la sociedad vasca hacia un determinado modelo político". "Respetamos a la sociedad como es", aseguró.
Tras recordar que los socialistas vascos ayer fueron a la sede de Sabin Etxea invitados por el PNV, afirmó que éste debería ser "más comedido con aquellos que son llamados a su casa" y no salir, posteriormente, diciendo que los representantes del PSE-EE han hecho "un ejercicio de cinismo". "Le pediría a Iñigo Urkullu un poquito de serenidad y respeto", señaló.
En esta línea, recordó que la formación jeltzale le propuso un acuerdo con los socialistas "para que Ibarretxe fuera elegido lehendakari", y apuntó que el PSE-EE le respondió que se ha comprometido con la sociedad vasca a "impulsar el cambio".
"Coherentemente, vamos a presentar la candidatura de Patxi López para que pueda ser elegido lehendakari. Vamos a buscar el acuerdo y el diálogo con todos", indicó. En este sentido, aseguró que el Gobierno socialista dialogará con todos y tendrá "como objetivo unir y dar estabilidad al país".
Rodolfo Ares afirmó que las bases que ayer le planteó el PNV son las que ha defendido su partido a lo largo de la campaña y señaló que "el problema es que la mejor garantía de que las cosas cambien y que, por lo tanto, las cuestiones fundamentales del país, que ahora dice el PNV que son su prioridad y no lo han sido hasta ahora, es un lehendakari socialista".
"Por eso, lo haremos con toda tranquilidad y normalidad, y no va a pasar nada, por mucho que el PNV y el señor Urkullu estén de los nervios, amenazando y pronosticando conflictos, enfrentamientos y catástrofes", apuntó.
En este sentido, dijo que, vivimos en una sociedad democrática "y, si hay posibilidad de alternancia, habrá un Gobierno que esté presidido por un lehendakari socialista y será normal". "Y el PNV debería entenderlo así", precisó.
El secretario de Organización del PSE-EE aseguró que "no es un problema de Ibarretxe, sino de la política que ha defendido y volvería a defender el PNV con Ibarretxe a la cabeza, porque Urkullu habla de pluralidad y ésta es la que defendía Josu Jon Imaz, que tuvo que dejar la presidencia del PNV porque nadie le acompañó para hacer las reformas necesarias para ser el cauce central de la política vasca y modernizar el proyecto".
"Todo el mundo sabe que, si tuviera oportunidad, Ibarretxe, volverían a hacer lo mismo, porque aunque el señor Iñigo Urkullu quisiera hacer otra cosa, que no sé si querría a hacerlo, sus previsibles socios le empujarían a ir más lejos todavía porque es evidente que tendría que pactar con dos partidos claramente independentistas, como son EA y Aralar", subrayó.
En esta línea, aseguró que los socialistas pretenden "un Gobierno plural, que apueste por el diálogo entre diferentes para construir el futuro entre todos y para todos, y el PNV, hasta ahora, ha hecho lo contrario, y si tuviera la oportunidad, volvería a hacer lo mismo". "Nosotros vamos a cumplir nuestro programa electoral para no hacer frentismos", señaló.
LOS PARTIDOS DE IZQUIERDAS
En esta línea, añadió que desconoce por qué el PNV afirma que sólo va a conseguir los votos del PP porque "no hay que descartar que algún otro partido pueda apoyar algunas" de sus propuestas". "Vamos a ver aquellos que se denominan partidos de izquierdas qué van a hacer con sus votos en el Parlamento", manifestó.
Tras precisar que Aralar "sólo ha dicho que va a ir a la oposición", destacó que "los demás tampoco han dicho nada todavía". "Nosotros hablaremos con todos. Pero me parece necesario, por firmeza y claridad democrática, dejar la cosa muy clara: que los votos del PP son tan legítimos como los de cualquier otro partido. Y, en todo caso, son mucho más legítimos, democráticos y limpios que los que el PNV buscó y recibió en legislaturas pasadas, me refiero a los de los radicales abertzales", dijo.
El dirigente del PSE-EE insistió en que los respaldos populares "son más limpios que los que Ibarretxe recibió de EHAK" para su investidura y los que él y su partidos "buscaron" para "sacar adelante el Plan Ibarretxe o la Ley de Consulta".
LA LLAVE
Además, aseguró que el PP "no va a tener la llave" del Gobierno socialista, sino que "la tendrá Patxi López". "Tendrá un Gobierno fuerte. Buscaremos los apoyos de todos, y cada uno tendrá que decidir si quiere apoyar las políticas que vamos a proponer en el pleno de investidura y que, como no podía ser de otra manera, será con la que nos presentamos a las elecciones", dijo.
Reconoció que el PSE-EE tiene "una dosis de responsabilidad muy importante" porque, al acceder al Ejecutivo, tiene que "cambiar muchas cosas en el País Vasco, y parece, por lo que están diciendo los responsables del PNV, que no lo van a poner fácil". En este sentido, contrapuso la actitud de los jeltzales con la de los socialistas, "que, desde la oposición en los últimos años, han arrimado el hombro para dar estabilidad al país".
"Parece que ellos quieren hacer todo lo contrario, ir al enfrentamiento, a la confrontación, a la bronca, a la división. Será clarificador también y pondrán a cada uno en su sitio los comportamientos de unos y de otros. Y espero que la ciudadanía vasca sepa valorarlos", manifestó.
Rodolfo Ares insistió en mandar "un mensaje de tranquilidad y serenidad a la sociedad vasca". "No va a pasar nada, no pasa nada en ningún país democrático cuando hay relevos, cuando hay alternancia. Pasará, en todo caso, en el PNV, pero no tiene por qué pasar nada en el conjunto de la sociedad. Y hay que decir a los dirigentes del PNV que se tranquilicen y acepten con normalidad democrática que se puede ganar y se puede perder", apuntó.
Según precisó, "ésta es una negociación, una ronda de conversaciones con todos los partidos para formar Gobierno vasco", por lo que instó a no "mezclarlo" con otros gobiernos en ayuntamientos o diputaciones.
"El PNV ha dicho que el hecho de que no puedan tener el lehendakari significará que no darán el apoyo al Gobierno socialista en el conjunto de España. Si hace dos días decían que eso era útil y era una política responsable, ahora, ¿qué pasa?, ¿que van a dejar la política responsable y se van a convertirse en unos irresponsables?", preguntó.