Redacción Madrid. 16 de Septiembre.

    El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, anunció hoy que su partido actuará con responsabilidad ante el rechazo del Tribunal Constitucional a la Ley de Consulta, sin "arriesgar el futuro" de los vascos "con costosas apuestas". Además, destacó que la consulta no es "el objetivo final" de la formación jeltzale, sino el logro de "mayores cotas de autogobierno", y emplazó a "pactar la solución vasca".

   En un desayuno del Foro Nueva Economía celebrado en Bilbao, Urkullu afirmó que el PNV "seguirá siendo el mismo partido responsable de siempre", y aseveró que "ni los vetos ni las imposiciones ni los reiterados rechazos ni las interpretaciones y sentencias judiciales van a hacer" que se "tiren al monte".

   No obstante, aseguró que mantendrá "la firmeza en sus principios", pero "firmeza con inteligencia", sin "enredarse en un discurso, según los intereses de unos y de otros ladrando a la luna", sino defendiendo de forma "firme e inteligente del autogobierno".

   Según apuntó, su "compromiso es el permanente y concienzudo trabajo con templanza, determinación y rigor, con sentido común y sentido institucional", y precisó que su objetivo "fundamental" es conseguir "las mayores cotas de autogobierno posible en un horizonte de convivencia y al ritmo que la sociedad lo demande".

   Tras señalar que era previsible que se impidiera la celebración de la consulta, apuntó que buscarán "el menor resquicio para seguir avanzando en el autogobierno y en su desarrollo normalizado desde una convivencia política leal". "Y tengan por seguro que no vamos a renunciar a los principios que amparaban la Ley de Consulta", subrayó.

   A su juicio, "quieren mantener tercamente las puertas para la solución al problema político cerradas" y con la norma aprobada por el Parlamento vasco el pasado 27 de junio se pretendió "abrir una puerta a la esperanza, una puerta a la solución del conflicto político vasco".

   "Han pretendido dar a la ciudadanía de Euskadi otro sonoro portazo en el unánime nombre de la sacrosanta soberanía de la nación española, según esquemas del pasado. Para ellos, no cabe un compromiso con la interpretación actualizada de los Derechos Históricos del Pueblo Vasco o con la capacidad de una consulta no-vinculante al referirnos a la posibilidad de un final dialogado de la violencia o la necesidad de un acuerdo político entre los partidos políticos", subrayó.

   Para el líder jeltzale, "se han quedado en el siglo XIX y en su discurso no hay cabida para los conceptos actuales de co-soberanía". "Para los miembros del Tribunal Constitucional, el PP y PSOE sólo existen el pueblo español, la nación española. Son ellos los que sitúan claramente los campos: o España o Euskadi", añadió.

   Iñigo Urkullu señaló que "la sentencia unánime del Tribunal Constitucional parece estar imbuida del 'espíritu del miedo a la ruptura de España', cuando las preguntas contempladas en la Ley en modo alguno significan la subversión del orden constitucional".

   INSTANCIAS SUPRAESTATALES

   A su entender, es "lógico y legítimo que, una vez cerradas todas las vías jurisdiccionales internas", se recurra a "otras instancias supraestatales, una vez acatado pero no compartido el fallo del Tribunal Constitucional".

   "¿Hay algún problema en acudir a las instancias pertinentes en Europa si entendemos que hay más ámbitos que los del Estado español una vez agotados los mismos y según interese? La cuestión, en este punto, es hacerlo de manera responsable. Y es lo que está analizando PNV, sea la vía judicial sea la parlamentaria, sea la que sea, desde el respeto y acatamiento de la legalidad, pero también desde la no resignación y desde la actitud positiva", destacó.

   Asimismo, señaló que "algo no hemos hecho bien si seguimos enredados mediáticamente como si la consulta fuera no ya a lo único a lo que nos dedicamos sino, incluso, olvidáramos la causa de esta cuestión que no es otra que la persistencia de una violencia".

   En esta línea, apuntó que, como en el mus, "se puede avanzar poco a poco sin llamar la atención". "En el PNV vamos a seguir jugando con responsabilidad y prudencia nuestras cartas, sin arriesgar el futuro de nuestro pueblo con costosas apuestas, pero sin renunciar a nuestros objetivos", dijo.

   En esta línea, advirtió de que, "si el PSOE o el PP, incluso la izquierda radical, entienden que el autogobierno vasco es un juego, puede parecer que hemos perdido esta mano, pero la partida es larga". "Sabremos darnos mus, cuando sea necesario, hasta conseguir mejores cartas para jugarlas con habilidad y ganar el juego y la partida del autogobierno, logrando adhesiones a un proyecto compartido de construcción social y nacional de Euskadi según los vientos de la Europa avanzada", aseveró.

   El presidente del EBB aseguró que el PNV "no renunciará nunca al derecho de la sociedad vasca a decidir su propio futuro". En este sentido, aseguró que, para su formación, "la consulta, pero no es a lo único que se dedica el partido, ni el lehendakari, ni las instituciones vascas".

   "Siendo importante, no es el objetivo final. Se confunden aquellos que identifiquen que la consulta es el objetivo final del PNV. El objetivo final es alcanzar las mayores cotas de autogobierno posible para los vascos", declaró. Por ello, insistió en que lo que preocupa a la formación jeltzale "no es tanto el éxito o el fracaso de la consulta, sino el bienestar de los vascos".

   "LA LACRA SECULAR DEL CONFLICTO"  

   El líder jeltzale dijo que su partido no se resigna "a seguir sufriendo las lacras del secular conflicto vasco". "En Loiola demostramos que estamos muy cerca de la 'solución vasca', que si queremos podemos. De hecho, nos entenderemos en cuanto vuelva una situación propicia, pero si hay voluntad. Desgraciadamente, hoy, ni PSOE ni PP ni el mundo radical la tienen con PNV", señaló.

   Tras puntualizar que "la ceguera de la llamada izquierda abertzale es, por supuesto, el primer y principal obstáculo para alcanzar esa solución", manifestó que "ETA pervierte y castra todo cuanto le rodea y la izquierda radical política es hoy más estéril, más yerma de ideas y de valentía que nunca, pero tampoco ayuda la doblez de la política de ZP".

   En este contexto, destacó que lo que se necesita es "estabilidad económica, estabilidad política y voluntad para 'pactar la solución vasca'".

   Para Iñigo Urkullu, ello se debe abordar "sin imposiciones externas, desde la bilateralidad asimétrica, desde la necesaria confianza recíproca, desde la lealtad y el respeto mutuo y desde la no demonización del nacionalismo vasco de compromiso institucional y vertebrador que representa EAJ-PNV".

   Además, abogó por "el final dialogado de la violencia" porque "la paz es mucho más que lo que es la mera ausencia de violencia, es también construir caminos de reinserción y de reconciliación". No obstante, insistió en "la delimitación de los campos porque no corresponde a una organización terrorista condicionar ni tutelar la vida política". "Las cuestiones políticas corresponden a las formaciones políticas exclusivamente", señaló.

   TRIBUNAL CONSTITUCIONAL

   Asimismo, afirmó que no aspira a que nadie del PNV forme parte del Tribunal Constitucional y precisó que "la judicialización de la Justicia va más allá" de que su partido "tenga a una persona en el CGPJ", en referencia a Margarita Uria.

   Tras apostar por la reforma del TC, reiteró "la necesidad de una Sala especial para los asuntos que afectan a la Comunidad Autónoma Vasca". "Vemos que no hay voluntad por parte del Gobierno español ni del PSOE y del PP de hacer de éste un verdadero Tribunal Constitucional en el que las comunidades autónomas tengan su propio espacio", concluyó.