Zapatero dice en el Congreso que apoya una Repsol española
Redacción Madrid. 26 de noviembre.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró hoy que el criterio del Ejecutivo "es muy claro" respecto a la posible entrada de la rusa Lukoil en Repsol y "apoyará" que la petrolera, y sus accionistas de referencia y control, sean españoles, siempre defendiendo su "autonomía e independencia", y el respeto al libre mercado, por lo que descartó de nuevo la intervención pública.
"El Gobierno va a hacer las cosas bien", aseveró.
Ante esto, el líder del PP, Mariano Rajoy, le advirtió de que le acusará ante las Cortes de ser el responsable de un "escándalo mayúsculo" y un "fraude de ley" si no impide la venta de Repsol a una "compañía dudosa" controlada por el Gobierno de Vladimir Putin, que, aseguró, "usa sus armas energéticas como todos hemos visto que las usa".
Ambos protagonizaron su primer debate público sobre esta cuestión en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, una semana después de conocerse la noticia.
"Nuestra tarea es apoyar y defender la solidez de Repsol como hemos hecho desde el primer día, a pesar de las duras críticas de su formación", espetó Zapatero a Rajoy, reivindicando asimismo la "larga tradición de actividad económica" de Sacyr y la Caixa, que han mostrado su intención de desprenderse de su participación en la petrolera.
DEFENDER A REPSOL EN VENEZUELA.
Zapatero insistió en que defender a Repsol implica también "en todos los países donde Repsol obtiene producción de petróleo", incluyendo Ecuador y Venezuela, momento en el que fue interrumpido por los abucheos de la bancada 'popular'.
Por su parte, Rajoy aseguró que el Gobierno "animó" la entrada de Sacyr en el capital de Repsol, a través de un crédito sindicado de 5.000 millones de euros en el que participó el Instituto de Crédito Oficial (ICO).
"Ahora conocemos que se pretende vender ese 20% más un 9,9% (en manos de la Caixa a través de Criteria) a una empresa rusa que, como cualquier persona entiende, solo lo va a comprar si tiene el control total de la compañía", señaló, para quien esta operación supondría un "enorme fraude" en contra de los intereses "de cientos de miles de pequeños accionistas" de Repsol YPF.
LAS "COSAS SERIAS"
Rajoy advirtió a Zapatero de que Repsol "no es una cadena hotelera", sino que tiene un "alto valor estratégico" que no se puede utilizar para resolver los "problemas personales" de empresarios e incluso del propio jefe del Ejecutivo.
A esto, Zapatero respondió al líder 'popular' que sus argumentos "no son muy originales", y le pidió que vaya "a cosas serias" a la hora de enfocar este debate. En este sentido, reiteró que el Gobierno actuará de acuerdo a las normas comunitarias y la libertad de mercado, frente al "intervencionismo" que, a su juicio, reivindica ahora el PP.