La finalidad de este libro es mostrar al lector algunas de las más relevantes efemérides que han jalonado la influencia de España en la historia del mundo. Cada día del año, el autor detalla un acontecimiento que hace brillar con luz propia a nuestra nación, “proponiéndonos un viaje inolvidable de efemérides al pasado de la mano de insignes personajes que a todos nos conviene recordar,”, en palabras de la escritora Almudena de Arteaga, prologista del libro. “Escritores, soldados, descubridores, inventores y reyes saltan de un siglo a otro vertiginosamente haciéndonos partícipes del acontecimiento histórico que vivieron y tendiéndonos la mano para pasear junto a ellos por hermosos parajes tanto españoles como pertenecientes a los confines más perdidos del mundo”
Con una bandera en el balcón de su casa o en el jardín. Iniciamos una campaña para conseguir que las ciudades y puebñlos de España se inunden de banderas de España durante todo el puente, pero especialmente el 12 de ocutbre.
Francisco Torres García.- Curiosamente -¡caprichos del destino!- cuando en 1972 se colocó en el Teatro de la Comedia de Madrid una lápida recordando que allí se fundó Falange Española, hoy retirada por la corporación municipal del PP escudándose en una aplicación sin base de la llamada Ley de la Memoria Histórica, se representaba la incomparable Yerma de Federico García Lorca. Por ello, un periodista notorio, de esos que ya pensaban en el después de Franco, entre líneas, hizo referencia al asesinato de Federico y a la "responsabilidad" de los falangistas que ya empezaban a cargar con las "culpas" de casi todos. Otro periodista le contestó que a la hora de buscar responsables debiera mirar en otras orillas ideológicas.
La Lupa del YA. Mientras en España se intenta ocultar la bandera en ciertas regiones, en EEUU los colores nacionales se han exhibido con orgullo en la ciudad de San Agustín, la más antigua de EEUU, fundada por el reino de España.
La duquesa llegó a ser dieciocho veces Grande de España antes de que legara a sus hijos cuatro de sus títulos nobiliarios con grandeza, quedándose con cuatro menos. Los ducados de Huéscar y Aliaga habrían pasado a posesión de sus dos hijos mayores directamente tras la muerte del XVII duque de Alba de Tormes, sin haber estado nunca en sus manos. Además el ducado de Liria y Jérica poseen una sola Grandeza, al igual que el condado de Lerín y la dignidad asociada de Condestablesa de Navarra y de Éibar. Por estas razones, Cayetana de Alba era catorce veces Grande de España.