Caso Errejón: pío, pío, que yo no he sido
Luis Losada Pescador. Dime qué causas defiendes y te diré qué pecado cometes. Es el principio que cabe aplicar a una izquierda que presume de igualitaria pero peca de esnobista, presume de feminista y practica el machismo más rancio y repugnante que pensábamos desterrado. No es nuevo. Ya siendo Pablo Iglesias e Iñigo Errejón más jóvenes, las mujeres del 15M, las suyas, acusaban violaciones en la puerta del Sol. Y no fue la derecha la que dijo de una periodista que “la azotaría hasta que sangrara”. Eso sí, son capaces de ponerse estupendos con el ‘pico’ de Rubiales o rasgarse las vestiduras cada vez que aparece un caso de violencia de género. ¿Cómo son capaces de cabalgar en semejante contradicción?, ¿con qué estómago digieren tal hipocresia?