David vence al Goliat woke en el referéndum sobre la familia en Irlanda
José Luis Orella
El referéndum sobre la familia, que proponía modificar la definición de familia y sobre los cuidados a los familiares discapacitados, en el Artículo 41.1.1 y el Artículo 41.3.1 fue derrotado con un 67,69 por ciento de votos negativos, y por un 73,93 por ciento en contra de la enmienda sobre cuidados. Un total de 1.114.620 personas votaron por el No, frente a 393.053 votantes por el Sí. El resultado fue muy claro y es el porcentaje más alto de votos en contra en cualquier referéndum de la historia de Irlanda. Hasta este momento el porcentaje más alto de votos en contra fue el que rechazó la enmienda 35, para reducir a 21 años la edad de elegibilidad para la elección al cargo de presidente.
El proyecto de reformas contaba con el respaldo de los tres partidos gubernamentales, el Fine Gael, el Fianna Fáil, el Sinn Féin, los Verdes, los Laboristas, y los Socialdemócratas junto a la mayor parte de ONGs conocidos. El Gobierno, presidido por el Taoiseach Leo Varadkar, del Fine Gael, pretendía celebrar la victoria del SI del referéndum en el Día Internacional de la Mujer, recibiendo el ejecutivo la aprobación de las feministas de Irlanda. El Taoiseach Leo Varadkar, de origen indio, pasará a la historia por ser el político que ha destrozado la imagen católica de Irlanda, instrumentalizado el escándalo de la pederastia en algunos clérigos para implantar el aborto en la isla, y como gay declarado, favorable al matrimonio homosexual, el mismo está casado con el médico Matthew Barrett. El referéndum era una batalla más en el orden de eliminar la imagen católica de Irlanda y poner al Fine Gael en buena posición electoral, es el partido integrante del Partido Popular Europeo, frente al Sinn Féin que todas las encuestas les dan en cabeza por primera vez en la república.
El referéndum sobre cuidados fue el más rechazado, tres cuartas partes de los votantes. Los protagonistas de la victoria son Ann Marie Flannagan y Margaret Kennedy, fundadoras de Equality Not Care, un grupo que considera que el Gobierno está discriminando a las personas discapacitadas y a sus familiares. La Dr. Kennedy es una defensora de los derechos de las personas discapacitadas en Irlanda. Ella y su hermana gemela tienen una rara enfermedad degenerativa neuromuscular. Ann Marie Flannagan es una feminista de derechos humanos y también discapacitada, activista climática y promotora de la justicia social. Ambas atacaron al gobierno cuando el Taoiseach Leo Varadkar negó que el Estado tuviese derecho para dar servicios de asistencia personal a los discapacitados. Dado que la mayoría de los cuidadores son mujeres, Ann Marie Flanagan atacó una propuesta de cambio constitucional que eliminaría cualquier mención de sus derechos económicos y denigraba la “dignidad de la familia”.
Las activistas por el NO únicamente tuvieron el apoyo de la Iglesia Católica y de políticos marginales. Los más célebres el senador independiente Michael McDowell, nieto del revolucionario nacionalista Eoin MacNeill. McDowell fue fundador y líder de los Demócratas Progresistas a mediados de los años 1980, una escisión del Fianna Fail, retirándose luego de la política, pero logrando un escaño al senado como independiente. El otro apoyo fue Peadar Tóibín, líder y único diputado del partido Aontú. Aontú es un partido que apareció en 2019 de una escisión del Sinn Féin, al oponerse al aborto y propugnar la defensa de la familia y del Estado de Bienestar. No cabe duda que la sociedad irlandesa ha vuelto a su camino y ha sabido mostrar su faz ante un arco parlamentario que representa en su totalidad las ideas woke y se había alejado de los problemas reales del pueblo.