El asesoramiento de España en materia de Seguridad e Inteligencia es de gran valía para Uzbekistán y toda Asia Central
Daniel Ponce Alegre. Diplomado en Seguridad y Defensa - UNED. Uzbekistán, no sólo es el bello país de milenaria Historia, centro económico y cultural del Imperio Persa, con sus sátrapas, y del Imperio Mogol, con sus khanes de la Orda de Oro, en el que se encuentra la legendaria ciudad de Samarcanda, capital centroasiática de la Ruta de la Seda.
Uzbekistán, también es el lugar de donde era natural el autor del atentado con camión, el pasado mes de abril, en Estocolmo, además de cantera de islamistas radicales y territorio de emigración a Rusia. En la década de los años 90 del siglo pasado, Uzbekistán vio nacer, al amparo del islamismo pakistaní ( de raíz saudí - wahabista ) y del checheno ( ya neutralizado por la inteligente política antiterrorista del Presidente Vladimir Putin ), un movimiento islamista extremadamente radical - salafista, también de base wahabí, que se implicó desde entonces en los diversos atentados que sufrió Rusia, las repúblicas centroasiáticas y sus intereses, así como el turismo en toda la región de Asia Central.
La motivación de dicha Organización islamista era crear un sultanato en la región uzbeca que estuviese bajo el paraguas de un emirato hasta Pakistán y que llegase Mar de la India. El actual Uzbeksitán, país laico de mayoría musulmana, con una profunda influencia cultural y religiosa persa, y antigua república soviética, no reniega de sus estrechos lazos históricos, pudiendo remontarnos al S. XIII y las migraciones de sus pueblos nómadas, con Rusia y el resto de repúblicas de Asia Central.
Uzbekistán estuvo dirigida desde 1989, de forma firme, y a la vez inteligente y prudente, por el recientemente fallecido Islam Karímov. El que entonces era el Primer Ministro, en el año 2016, Chavkat Mirzioiev, tomó las riendas del país, siguiendo al estela sabia y prudente de su predecesor y hace escasas semanas estuvo reunido con el rey Felipe VI, como podemos apreciar en la foto, considerando entre otras cuestiones la Cooperación Internacional al Desarrollo y la colaboración en materia de Turismo, Seguridad e Inteligencia, aprovechando el nuevo impulso dado con motivo de la Nueva Ruta de la Seda ( 2016 - 2020 ), cuyo límite occidental está en España, siendo la ciudad de Valencia la Sede.
El Movimiento Islámico de Uzbekistán( MIU) se gestó a partir de 1991, año de la independencia del país. Surgió en los territorios del Este, en el Valle del Ferganá, que también incluye una parte de Kirguizistán y Tayikistán. Entre los años 1992 y 1997 el MIU estuvo detrás de una serie de atentados en esta parte del país. La Organización intentó introducir la ley islámica, financiados por Arabia Saudí y Pakistán, en la década de 2000 en el sur de Uzbekistán. Para hacer frente a la efectiva política antiterrorista del entonces Presidente Karímov, con el apoyo de la inteligencia rusa y sus medios económicos y militares, el MIU se alió con los talibanes de Afganistán y en el año 2015 jura lealtad al grupo islamista Estado Islámico.
Según nuestros servicios de inteligencia, así como los de Rusia y China ( a la que preocupan los lazos entre el MIU y los islamistas - nacionalistas uigures del sur del país ), el MIU y los uzbekos han alcanzado cotas de poder e influencia muy altas en el islamismo yihadista global. Es en este contexto en el que España está ofreciendo su amplia experiencia e Inteligencia. En un próximo artículo en este Diario, comprometido con la promoción de la Cultura de Seguridad e Inteligencia, trataremos, Dios mediante, más en profundidad y detalle esta cuestión geoestratégica.