Redacción Madrid. 28 de diciembre.

El portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Josu Erkoreka, aseguró hoy que el Gobierno del PSOE "no renuncia definitivamente un intento dialogado" de propiciar el fin de ETA cuando la banda esté "claramente derrotada en lo operativo y en lo social".

   En una entrevista concedida a la Cadena Ser, Erkoreka afirmó que, de cara las elecciones autonómicas, "se desinfla el globo" que protagonizó el PSE-EE en los pasados comicios generales, donde el voto se "polarizó" entre José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy.

   En cuanto a las declaraciones realizadas ayer por el presidente del Gobierno central sobre la imposibilidad de retomar un diálogo con ETA, Erkoreka reconoció que, "mientras ETA siga en activo, con todos los frentes abiertos e intentando cometer atentados", las vías del diálogo "quedan necesariamente ocluidas".

   No obstante, apuntó que esto no quiere decir que no "se guarde en la recámara la posibilidad de un intento dialogado para un momento en el que ETA aparezca claramente derrotada en lo operativo y en lo social". "Creo que a esto tampoco renuncia definitivamente el Gobierno", insistió.

   GOBIERNO VASCO

   Preguntado por un posible Ejecutivo vasco de coalición entre PNV y PSE-EE, indicó que "hay que esperar a que se produzcan los resultados electorales" de marzo porque, aunque las encuestas "apuntan en esa dirección" de acuerdo entre socialistas y jeltzales, "lo que vale es lo que decidan los ciudadanos en las urnas".

   "El globo inflado que supuso para el Partido Socialista el resultado de las elecciones generales se desinfla y se pone de manifiesto que el ciudadano vasco percibe que estas elecciones de marzo no son unas generales", advirtió.

   Para el portavoz jeltzale, el PSE-EE "se acerca más" en las últimas encuestas "a donde serán probablemente sus resultados" en las autonómicas.

   Asimismo, destacó que los sondeos también muestran que "parece que el voto se polariza" entre los candidatos socialista y jeltzale, Patxi López y Juan José Ibarretxe, respectivamente. "Lo previsible es que, probablemente, tengamos una campaña fuertemente bipolarizada entre estas dos posiciones", añadió.