Javier García Isac. Lo cierto es que me trae sin cuidado lo que suceda en el Partido Socialista. Partido, nacido en la mentira y en la corrupción. Su historia es un cumulo de desatinos, de despropósitos. Llevan a gala ser el partido que durante más tiempo ha gobernado en España y ciertamente, su mano se nota. No tenemos más que observar cómo está este país y aunque ahora gobiernan otros, su impronta deja una huella difícil de borrar, entre otras cosas, por la cobardía de los actuales gobernantes.

El Partido Socialista presentó tres candidatos que solo se diferenciaban entre sí por su grado de maldad. Ninguno es competente, mas bien me parecen de perfil bajo, como si nadie en esa organización deseara coger las riendas de un partido desnortado. Sus propuestas, las de los tres candidatos, no aportaban nada nuevo. Sus consabidos tics anticlericales: que si denunciar los acuerdos con la Santa Sede; que si el Concordato; que si Monarquía o Republica....todo muy actual y de gran preocupación en la calle. Parece que los ciudadanos no hablan de otra cosa que no sea de curas. Uno de los tres ínclitos, el que tiene fama de más izquierdista, incluso apoya un referéndum de cesión de Cataluña. Parece que lo progre, está empeñado en atacar a España, en destruirla tal y como la conocemos. Esto tampoco es nada nuevo. Es curioso como partidos supuestamente nacionales apoyan toda iniciativa para cargarse esta Nación.

Lo que en principio podría ser una unión antinatural (la de una izquierda nacional con el separatismo), en España no lo es. Claro, ¿Qué podemos esperar de un partido que en su ADN lleva la corrupción por bandera y ha sido extremadamente comprensivo con los crímenes de ETA hasta que les llego el turno a ellos? ¿Qué podemos esperar de un PSOE tan contradictorio que está en contra de la pena de muerte, apoya el aborto y, su mejor manera de acabar con el terrorismo es montar crímenes de estado a través de los GAL y de paso llevarse los fondos reservados? ¿Es este el partido de la libertad, la Democracia, los valores y los 100 años de honradez?, ¿o es el partido que tapa a los ladrones y corruptos de su sindicato hermano en Andalucía que se llevan el dinero destinado a parados? Insisto, no me gustaba ninguno de los tres, ni siquiera el vencedor. Todos ellos competían por un voto cortoplacista que a lo mas, espantara a los que de buen corazón, siguen creyéndose sus mentiras. Un voto alternativo muy alejado de la realidad, por muy de moda que ahora esté. La solución no es acercarse al modelo bolivariano, por cierto, modelo bastante más patriótico que los que aquí lo defienden. La izquierda en general y el Partido Socialista en particular, son expertos en el arte de la mentira y la tergiversación y, ninguno de estos tres candidatos que optaban a la Secretaria General del partido, parece querer cambiar esta tendencia. Son más de lo mismo pero con menos estilo, con menos glamour y con menos imaginación que sus antecesores. Que Dios les coja confesados, que a mi nada de esto me sorprende ya. Javier Garcia Isac Una Hora en Libertad