Un Papa habla por primera vez del "genocidio armenio" y Turquía protesta ante el Nuncio
La Lupa del YA. Dicen los espertos que es la primera vez en cien años que un Papa habla abiertamente de genocidio con respecto a los armenios en 1915. El Papa Francisco ha utilizado el término "genocidio" para referirse a la masacre de los armenios por parte de los turcos hace justo 100 años, un hecho jamás reconocido por Turquía. Ankara ha convocado como protesta al embajador del Vaticano en su país. "El siglo pasado, la familia humana sufrió varias tragedias sin precedentes. La primera, que está considerada como el primer genocidio, golpeó al pueblo armenio", ha dicho el Pontífice.
Sus palabras se han producido durante el saludo inicial a los participantes de la misa por el centenario del "martirio" armenio, celebrada en la basílica de San Pedro y en la que se ha proclamado doctor de la Iglesia a San Gregorio di Narek.
"Hoy recordamos con el corazón lleno de dolor, pero también de esperanza, el centenario de aquel trágico evento, de aquel atroz y descabellado exterminio que vuestros antepasados sufrieron cruelmente", ha afirmado. Junto a él, han concelebrado la misa el patriarca de Cilicia de los Armenios Católicos, Nerses Bedros XIXM, y el Supremo Patriarca de los Católicos de todos los Armenos, Karekin II. En la basílica se encontraba también el presidente armenio, Serz Sargsyan.
Los armenios calculan que aproximadamente 1,5 millones de personas murieron entre 1915 y 1917, cuando el Imperio Otomano, al que pertenecían ambos territorios, llegaba a su fin. Los turcos consideraron que apoyaban a sus enemigos, los rusos, en el marco de la Primera Guerra Mundial. Armenia, situado en el Cáucaso meridional y que perteneció a la URSS, es un país independiente desde 1991.
Sólo 22 países reconocen el genocidio, entre los que no está España. Pero, para Turquía, que asegura que se trató de una guerra civil, es un asunto que aún provoca graves crisis diplomáticas. La cuestión es de capital importancia para Ankara ya que una de las condiciones impuestas por Bruselas para que pueda integrarse en la Unión Europea es el reconocimiento de dicho genocidio.
En el año 2000, Juan Pablo II firmó un documento junto al patriarca armenio en el que denunciaba aquel hecho histórico, pero Bergloglio ha sido el primer Papa que pronuncia esa palabra en una misa en el Vaticano.