La Fundación Educatio Servanda, promotora del colegio, presentó la solicitud de licencia en el Ayuntamiento el día 23 de Mayo de 2014, subsanada a instancia del propio Ayuntamiento, el día 25 de junio sin que desde entonces hayamos tenido más noticias. Casi dos meses sin resultado que contrastan con los siete días en que se resolvió la misma solicitud de licencia del colegio concertado que promovió el propio consistorio.

Ante la información difundida en algunos medios en el que se hacen eco de unas declaraciones de la primera teniente de alcalde del ayuntamiento de Parla Doña María José López Bandera, nos vemos obligados a poner de manifiesto la falsedad de dichas declaraciones.
Educatio Servanda solicitó licencia de obras para la instalación del colegio provisional el día 23 de Mayo del año 2014 documento que puede verse en nuestra web No entendemos que sea la misma María José López Bandera la que afirme que “el colegio religioso no ha solicitado licencia de obras” cuando ella misma responde y firma un requerimiento de documentación que tiene fecha de salida del propio ayuntamiento el día 6 de junio de 2014, sobre nuestro expediente de licencia nº 000016/2014-OBC. Es igualmente difícil
de entender que en ese requerimiento se nos reclame una documentación que en su mayor parte ya formaba parte de la solicitud de licencia de obras del día 23 de Mayo.
Aún así el día 25 de Junio es respondido ese requerimiento aportando nuevamente la documentación inicial y dos documentos requeridos que no estaban en nuestro expediente. A día de hoy no hemos recibido respuesta.
Ante la indefensión que suponen las constantes dilaciones, evidentes obstrucciones y burdos obstáculos a la licencia de obras del colegio Juan Pablo II, que en su primer año instalará una sencilla construcción modular industrial, por parte de los distintos funcionarios y políticos del ayuntamiento, hemos dado orden de estudio a nuestro departamento jurídico. Hoy mismo han comenzado a analizar y consultar la documentación y testimonios de los distintos funcionarios y técnicos así como de las familias parleñas afectadas que también acuden al ayuntamiento a pedir explicaciones de este inexplicable retraso, por si pudieran ser constitutivas de delito.
La oposición política al colegio católico Juan Pablo II no es nueva y es pública. Sólo cabe pedir al consistorio que no sigan tratando de impedir con maniobras dilatorias administrativas el normal inicio del curso escolar de los más de cien alumnos que se encuentran matriculados en nuestro centro.