Redacción Madrid. 29 de enero. El suizo Roger Federer, número dos del mundo, cumplió con los pronósticos y se clasificó para la final del Abierto de Australia, primer 'Grand Slam' del año, al doblegar en tres mangas al estadounidense Andy Roddick.

   El helvético superó al de Nebraska por 6-2, 7-5 y 7-5 después de dos horas y siete minutos de partido y ya espera rival del duelo que medirá mañana a los españoles Rafa Nadal, número uno del ranking ATP, y Fernando Verdasco, que permitirá a la 'Armada' contar con un finalista en Melbourne Park tras doce años de sequía.

   Federer saltó a la cancha con las mismas sensaciones que había ofrecido en cuartos de final ante Juan Martín del Potro y no tardó en plasmarlo en el marcador con dos 'breaks' tempraneros que le permitieron dominar a su antojo (4-1).

   Esa renta fue suficiente para anotarse la manga en sólo 32 minutos en los que ganó el 82 por ciento de los puntos con 13 golpes ganadores. Sin embargo, Roddick no tenía intenciones de facilitar el trabajo a su rival y subió el nivel de su tenis en el segundo set.

   El estadounidense salvó dos puntos de 'break' al comienzo del segundo parcial, en el que le empezó a carburar su demoledor saque pues firmó seis 'aces' en sus cuatro primeros servicios. Todo apuntaba a un 'tie-break', pero Federer decidió saltarse el guión y rompió a su rival en el undécimo juego, aprovechando tres voleas a la red de un Roddick fallón en los momentos cruciales.

FEDERER LANZA UN AVISO A NADAL

   El tercer set marchó por los mismos derroteros. Roddick ya no era capaz de conectar 'aces' --sólo firmó 8 por los 16 de Federer-- y el suizo iba poco a poco labrando su victoria con bolas pegadas a la línea que desgastaban al de Nebraska.

   Como era previsible, el suizo supo apuntillar a Roddick con un sólo 'break' que le permite elevar a 16 las victorias ante el americano en 18 cruces en el circuito profesional.

   Ahora, está a sólo un paso de su decimocuarto título de 'Grand Slam', que le permitiría emular la gesta del estadounidense Pete Sampras, el más laureado de la historia.

   El domingo, Federer buscará alzar su cuarto entorchado en la Rod Laver Arena, después de ganar en 2004, 2005 y 2007, y dar un paso más hacia la reconquista de un número uno que Nadal le arrebató el pasado mes de agosto tras una primavera de ensueño con los títulos en Roland Garros y Wimbledon.