Guerra de banderas
Todos se retrataron en el episodio de san Jaume: el PP defendió la bandera, Colau trató de impedirlo, ERC se echa al monte y el recogenueces de Mas mira complaciente
Luis Losada Pescador. Como en las fiestas de la Mercedes ya no hay misa se han convertido en el rosario de la aurora. Alfred Bosch (ERC) aprovecha para colgar una estelada en el balcón del Ayuntamiento de Barcelona. Ardió san Quintín.
Ahora dice que “no estuvo acertado”. ‘Que me quiten lo izado’, debe pensar. Ante el órdago institucional, Alberto Fernández Díaz, trata de colgar una bandera española. El teniente alcalde de Colau trata de impedírselo y forcejean. Finalmente lo consigue por poco tiempo.
Atentos a la polémica por colgar una bandera española en un Ayuntamiento español…. Colau se retrata. La bandera española y el retrato del Rey parecen molestarle. ¿Por qué no iza unos vaqueros usados? Sería mucho más cercano al pueblo… Demagogos.
El resto de partidos también se retrata. Ciudadanos debía de estar en una tertulia y Miquel Iceta estaría bailando con alguien. “Bailar solo es lo peor”... Artur Mas sonríe complaciente al desafío de Bosch. Ya saben: ‘unos sacuden el árbol y otros recogen las nueces’. La misma sonrisa que expresó con la pitada al himno nacional. Cobarde.
Mientras, Mas prosigue su plan independentista como si en lugar de un ensayo, fuera real. De momento no ha conseguido que inspectores de Hacienda quieran dar el salto a la Agencia Tributaria catalana. Probablemente porque los inspectores saben que el instrumento más eficaz para defender la unidad –mucho más que el art. 155 de la Constitución- es la paralela de Hacienda, la española, la de verdad.
Pero el díscolo ex juez Santiago Vidal, expulsado del CGPJ por su deslealtd institucional, ya está trabajando para la Generalitat. Ha recibido el encargo de reclutar a los 250 jueces, 170 fiscales y 200 secretarios judiciales que abandonarían Cataluña si se declarara independiente. ¡Ingenuo! ¿Alguien se cree que sólo una cuarta parte de los jueces que juraron la Constitución serían fieles? Se cree el ladrón que todos son de su condición…
El pánico a la ruptura es tal que bastó con que el gobernador del Banco de España pronunciara la palabra “corralito” para que comenzara –en tiempo real- una fuga de depósitos que ya ha necesitado cuatro convoyes de efectivo para evitar el desabastecimiento monetario.
Vidal se cree su propio cuento. Lo malo es que su teatro lo pagamos todos…
El anzuelo del pescador
Urkullu habla de “nación foral vasca”. Se lo traduzco: ‘que no se enteren del privilegio del cupo vasco que nos quedamos sin kiosko’.
Podemos quiere herriko tabernas. Su apuesta cultural consiste en lugares con bar y venta de ‘merchandising’. ¡Qué casualidad, cómo las herriko tabernas!
Albert Rivera y el falangismo. Dice Albert Rivera que no basta con el miedo sino que es necesario “un relato común de ilusión”. ¿No se parece al “destino común en lo universal” de José Antonio? Poetas.