MANUEL PARRA CELAYA. Hace escasos días, con respecto a los nuevos proyectos de memoria histórica, dejé caer en un artículo las siguientes palabras: Nuestros recuerdos, nuestras evocaciones de una lejana, alegre e ilusionada juventud, nuestra intrahistoria, común y particular, pueden caer fácilmente bajo el peso de una ley inicua. ¿Será delito craso contar una anécdota campamental a tus hijos o nietos? ¿Podría ser objeto de sanción y objeto del Código Penal tararear en la ducha una vieja canción de marcha? (…)
Miguel Massanet Bosch. Parece que hemos entrado en unos momentos en los que toda reminiscencia de sentido común, de lógica, de sensatez y de prudencia ciudadana se van esfumando para dejar paso a una suerte de paranoia colectiva que se ha apoderado de una parte significativa del pueblo español, que parece que prefiere dejarse llevar por utopías ilusorias, proyectos irrealizables, sueños quiméricos y obsesiones disparatadas de modo que, abandonando los métodos democráticos y los procedimientos propios de todo Estado de derecho se ha decantado por una suerte de sistema anárquico.
Luis Losada Pescador Día histórico. “Se recordará por décadas”, dice una exultante Irene Montero. ¿Qué pasó? El movimiento feminista teledirigido por Podemos logra convertir el 8M en un nuevo 15M. Los motivos para la huelga son irrelevantes. Cada mujer tiene los suyos. “POaramos para que todo cambie”. El movimiento ha sido capaz de permear hasta el último rincón social y despertar la socorrida guerra de sexos.
Luis Losada Pescador. Puigdemont da un paso al lado. Mas non troppo. Lo hace “provisionalmente” y apunta a Jordi Sánchez, otro imposible. Además, exige ser reconocido como “presidente en el exilio” y pretende crear “estructuras paralelas” en Bruselas. Vamos, que no quiere ser un presidente florero.
Rafael Nieto. Como saben muchos de nuestros oyentes, en el libro DEFENDER LA VERDAD (Ediciones Esparta, 2017) he intentado subrayar algunas de las peores lacras sociales de la modernidad, entre las cuales, sin duda, la peor de todas es el relativismo moral, arma del Nuevo Orden Mundial y de la masonería universal para subvertir el orden natural de las cosas. De esas lacras, acaso la peor de todas sea la nefasta ideología de género, que pervierte la inocencia juvenil, desbarata el equilibrio de la familia tradicional y convierte a las personas en meras herramientas a disposición del lobby gay, homosexualista e izquierdista-liberal. Todo en ese proyecto ideológico es absolutamente demoniaco.
Miguel Massanet Bosch. Resulta lacerante el que continuamente tengamos que estarnos defendiendo de esta pandilla de seudo pacifistas de izquierdas, como sucede con estos desocupados de la AI (Amnistía Internacional), extremadamente preocupados por buscarles justificaciones a todos aquellos que insisten en violar las leyes de las naciones,; unos personajes que, según su criterio de lo que debe ser tolerancia, deberían ser defendidos por los gobiernos de aquellas naciones en las que se pretende romper la convivencia entre sus ciudadanos, actuar en contra de sus leyes democráticas e introducir el germen del asamblearismo populista como sustitutivo válido a cualquier tipo de gobierno ad hoc, democrático y formado en función del apoyo mayoritario de los ciudadanos, trasmitido a través de las urnas por el sistema de las votaciones secretas.
Manuel Parra Celaya. Cumplí con sumo agrado mi promesa y me sumergí en la lectura del libro En defensa de España, de Stanley G. Payne, que se ha convertido de un tiempo a esta parte en uno de esos historiadores malditos, silenciados y ninguneados, nunca rebatidos, por la historiografía a sueldo de la Verdad Única y Oficial. Me tomé mi tiempo para leerlo, no devorándolo de un tirón, sino pausadamente, lápiz en ristre para
Miguel Massanet Bosch. En este país no está de moda ser patriota. Parece que entre las nuevas generaciones no tiene éxito el declararse como patriota y, mucho menos, el sentirse emocionado o conmovido por los símbolos nacionales como la bandera española o el himno de España, la Marcha Real. No obstante, vean la incoherencia que se da cuando este patriotismo que parece que se toma a broma entre una parte de los españoles, afortunadamente no todos, tiene su busilis si tomamos en cuenta que, en algunas autonomías, estos mismos que se jactan de no tener sentimientos que los liguen especialmente a la nación a la que pertenecen, España.
Daniel Ponce Alegre. Teólogo y Antropólogo - Pontificio Instituto Oriental. Este año 2018, se cumplen 70 años de la creación del moderno Estado de Israel y 100 de la Declaración Balfour, carta que el Ministro de Asuntos Exteriores británico Arthur Balfour, en noviembre de 2017 y desde el Foreign Office, remitió a la vivienda londinense situada en la calle Piccadilly de Sir Walter Rothschild, y en la que " bendice el establecimiento de una casa nacional judía en Palestina ".
Rafael Nieto, director de Sencillamente Radio, en Radio Inter. Una de las características típicas de las democracias que no lo son, como la que venimos padeciendo en España desde la muerte de Franco, es que los poderes públicos, la clase política y los entes de dudosa legitimidad (pero siempre bien dotados de dinero público), se cachondean de las personas más indefensas y dolientes, y con especial ahínco de las víctimas del terrorismo. Las víctimas han pasado de ser respetadas, cuidadas y queridas, a ser objeto permanente de escarnio y burla, por la sencilla razón de que la moral pública ha desaparecido, y ahora no hay más que Fe que la Fe en el dinero y en los vicios.