Por Alborán Según las Diligencias Previas 60/2017 del Juzgado Centran del Instrucción nº 4 de la Audiencia Nacional (Juez Fernando Andreu, e
Colectivo Alborán. En puridad, deberíamos hablar de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), algo bastante distinto y más descriptivo de la realidad. Pero empecemos por los datos comúnmente aceptados de lo que representó la aportación rusa, englobando en esta palabra el del conjunto de la Unión Soviética.
Alborán. Volvamos a Ucrania para ponernos en situación. Esta nación, con una extensión y población similares a España (tiene más territorio y menos gente) hace un año tenía unas Fuerzas Armadas casi ¿un centenar? de veces mayores que las nuestras, sobre todo porque están apoyadas por una potente industria militar, algo que España se encargó de aniquilar en su suelo.
Colectivo Alborán La semana pasada, con el Ejército Nacional de Siria, en plena explotación del éxito alcanzado con la ayuda de Rusia frente al conglomerado de “rebeldes” apoyados por Estados Unidos y la mayoría de los países de la OTAN, junto con Israel, Turquía, Arabia Saudita, Jordania y los Emiratos del Golfo Pérsico, fue acusado de usar armas químicas. El martes día 4, tras un ataque de la aviación siria a posiciones rebeldes en Khan Sheikhoun (ó Jan Sheijun, en la provincia de Iblid, al NO. de Alepo y en la proximidad de Turquía), se constató que unas 80 personas habían muerto y cerca de 600 sufrían síntomas de haber sido gaseadas.
Colectivo Alborán. La noche del 21 al 22 del pasado mes de febrero fue detenido A.G.L., español de 39 años de edad, suponemos que caucasiano (es decir, blanco, pero no queremos incluir en “delito de odio”), acusado de y ha un delito de robo con fuerza en el antiguo Museo del Ejército en Madrid. Pillado “in fraganti”, la policía municipal halló en su poder un lienzo de grandes dimensiones, un libro y varios metros de cable de cobre que estaba sustrayendo.
El gran “mufti” de Arabia Saudita, un país donde se practica la versión más ultra-ortodoxa del Islam, ha declarado que los “yihadistas” del Estado Islámico y “Al Qaída” son los enemigos públicos numero 1 del Islam. Es la primera vez que una autoridad religiosa islámica saudita se pronuncia en contra del radicalismo terrorista del cual, según su opinión, los musulmanes son la principal víctima.